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La acreditación de competencias profesionales: una vía para obtener una titulación oficial

Reportaje

Este procedimiento dignifica trayectorias invisibles, reduce desigualdades y se alinea con las estrategias europeas de movilidad y aprendizaje permanente

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¿Y si todo lo que una persona ha aprendido a lo largo de la vida pudiera convertirse en un título oficial? Eso es precisamente lo que permite el sistema de acreditación de competencias profesionales en España dentro del marco común europeo.

Se trata de un procedimiento administrativo que permite reconocer oficialmente las competencias profesionales de ciudadanos que las han obtenido a lo largo de su vida laboral o a partir de situaciones de aprendizaje no formal, como cursos de formación no reglada o actividades de voluntariado.

En la práctica, esto supone un cambio real en el perfil profesional de la ciudadanía. Adam Abadías, asesor y evaluador de este sistema en Catalunya, ha acompañado a varias personas en este procedimiento: "Recuerdo el caso de una dependienta que llevaba más de 15 años trabajando en una tienda de barrio. Nunca había tenido ocasión de cursar estudios reglados, pero acreditó varias competencias de un ciclo de grado medio de FP y, gracias a ello, pudo presentarse a una oposición de auxiliar administrativa en su ayuntamiento", explica.

El impacto que está teniendo la consolidación de este sistema de acreditación de competencias ya es tangible: entre 2020 y 2024 se han acreditado en España 717.846 estándares de competencia, que son unidades básicas para analizar y evaluar la aptitud de las personas que participan en el procedimiento de acreditación de competencias, según datos oficiales.

Esta cifra refleja el impulso que ha tenido el procedimiento a partir de la entrada en vigor de la Ley Orgánica 3/2022, de ordenación e integración de la Formación Profesional.

Desde entonces, el procedimiento se ha configurado como un sistema abierto permanentemente, accesible en cualquier momento del año, sin depender de convocatorias puntuales.
 
Empleado de logística
Los trabajadores con más de 3 años de experiencia pueden acreditar las competencias adquiridas en su puesto de trabajo. Imagen: Freepik. 

¿En qué consiste el procedimiento de acreditación de competencias?

El procedimiento de acreditación tiene como referencia el Catálogo Nacional de Estándares de Competencias Profesionales (CNECP), un instrumento del sistema de Formación Profesional que relaciona las actividades profesionales identificadas en el sistema productivo español y las ordena por familias y niveles.

De acuerdo con la normativa, cada estándar de competencia citado en el CNECP describe un conjunto de tareas o funciones que una persona debe ser capaz de realizar en un entorno profesional concreto con el nivel de calidad exigido. Dicho de otro modo: es la pieza mínima que permite reconocer oficialmente lo que alguien sabe hacer en su trabajo.

Estos estándares de competencia pueden ser de nivel 1, 2 o 3, según su complejidad, y son las unidades que se toman como referencia para diseñar todas las ofertas formativas de FP.

Pasos a seguir para acreditar competencias profesionales

Las personas interesadas en acreditar alguno o múltiples estándares de competencia deben completar el proceso, que consta de 4 fases:
 
  1. Inscripción: se realiza través del portal habilitado por cada comunidad autónoma. En este paso se presenta la solicitud junto con la documentación que acredita la experiencia laboral, la formación no formal o el voluntariado relacionado con la competencia que se desea validar. Además, se eligen también las competencias en las que la persona desea ser evaluada.
     
  2. Asesoramiento: un profesional habilitado por la comunidad autónoma acompaña a la persona candidata, revisa su experiencia y elabora un informe orientativo sobre las posibilidades que tiene de obtener la acreditación.
     
  3. Evaluación: se comprueba si realmente la persona demuestra las competencias requeridas a través de entrevistas, pruebas, observación en el puesto de trabajo o simulaciones.
     
  4. Acreditación: si la persona supera la evaluación, recibe un documento oficial del organismo responsable en cada comunidad que reconoce sus conocimientos y capacidades. Dependiendo de los estándares de competencia que haya acreditado, podrá solicitar, a través de las vías establecidas por la comunidad, la obtención de títulos de FP que los contengan: Certificados Profesionales; ciclos de grado básico, medio o superior; o cursos de especialización de FP.
 
Un ejemplo exitoso de este procedimiento es el testimonio de la pedagoga Fanny Velásquez, quien ha obtenido el Certificado Profesional en Habilitación para la Docencia en Grados A, B y C del Sistema de FP al acreditar todas las unidades de competencia que lo integran. "Si ahora sumo estas competencias y esta titulación a mi recorrido académico y profesional, amplío el abanico de posibilidades de contratación", explica.
 

Requisitos para participar en el proceso de acreditación de competencias

Para poder participar, se deben cumplir estos requisitos mínimos:
 
  • Tener nacionalidad española o residencia legal en España.
     
  • Haber cumplido los 18 o 20 años, según el nivel del estándar de competencia que se quiera acreditar.
     
  • Tener experiencia laboral o formación relacionada (cumplir al menos uno de los siguientes requisitos):
     
    • Acreditar 3 años de experiencia laboral (mínimo de 2.000 horas trabajadas) en los últimos 15 años.
       
    • Haber realizado un voluntariado de al menos 3 años (mínimo de 2.000 horas).
       
    • Acreditar 300 horas de formación no formal en los últimos 10 años y en el ámbito que se desea validar.

      Existen cursos con temario adaptado a Certificados Profesionales, que permiten adquirir las competencias incluidas en el título y, además, presentarse al procedimiento de acreditación de competencias con garantías de acreditar el Certificado completo.

      En Educaweb puedes encontrar una amplia oferta de estos cursos adaptados, organizados por familias profesionales y niveles.

Fortalezas y debilidades del sistema de acreditación de competencias

El procedimiento de acreditación de competencias profesionales se está consolidando como un mecanismo de gran relevancia social y laboral, ya que "otorga visibilidad y valor a aprendizajes que, hasta ahora, quedaban invisibles", recuerda Antoni Esteve Benito, profesor de FP y profesional habilitado en el Servei d'acreditació de competències professionals de Catalunya.
 
Sin embargo, persisten obstáculos que limitan su alcance y expansión.
Según los expertos y fuentes consultadas para el monográfico La acreditación de competencias profesionales, las fortalezas y debilidades de este sistema son:
 

Fortalezas Debilidades
 
Soluciones a las debilidades
Apertura permanente y sin convocatorias puntuales. Falta de información y difusión: muchas personas desconocen su existencia o cómo participar. Realizar campañas de comunicación específicas en medios locales y redes sociales, con ejemplos reales y testimonios.
Reconocimiento oficial y válido en todo el Estado. Desigualdades territoriales: existen ritmos diferentes de desarrollo según la comunidad autónoma. Ampliar la red de centros y servicios de acreditación y llegar al medio rural.
 
Digitalización del proceso, que agiliza plazos y trámites. Complejidad burocrática: la documentación y el proceso pueden resultar farragoso. Simplificar formularios, habilitar asistentes virtuales y reforzar el acompañamiento en la fase de inscripción.
Dignifica la experiencia laboral, mejorando el perfil profesional y favoreciendo el acceso a mejores empleos. Falta de estadísticas nacionales homogéneas y dificultad de medir el impacto real. Recopilar y publicar datos por sectores y territorios anualmente.
Refuerza la autoestima, la motivación y la confianza de las personas para seguir aprendiendo.
 
Escasez de orientadores y evaluadores especializados en algunos sectores y territorios. Incentivar la participación de profesionales para que formen parte del proceso de acreditación.
Favorece la inclusión y la igualdad de oportunidades.

 
Acompañamiento desigual a las personas acreditadas para reorientar su posición en el mercado laboral una vez superado el proceso. Establecer mecanismos que garanticen directrices claras a las personas acreditadas en lo que respecta a oportunidades formativas y laborales.
Financiación europea y estatal que asegura recursos para su consolidación.
Elaboración propia a partir de datos extraídos del monográfico La acreditación de competencias profesionales.

La acreditación de competencias profesionales: una mirada territorial

Aunque el procedimiento es común en todo el Estado, su aplicación práctica depende de cada comunidad autónoma.

"Los gobiernos autonómicos son responsables de la acreditación y evaluación de cada caso, adaptando la normativa nacional a sus necesidades específicas y a los sectores económicos prioritarios", explica Francisca María Arbizu Echávarri, experta internacional en Cualificaciones, en Educación y Formación Técnica y Profesional (ETFP) y exdirectora del Instituto Nacional de las Cualificaciones (INCUAL).

Por ejemplo, en Andalucía la referencia es el Instituto Andaluz de Cualificaciones Profesionales; en Euskadi, el Instituto Vasco del Conocimiento de la Formación Profesional (IVAC-EEI); en Baleares, el Institut de Qualificacions Professionals de les Iles Balears (IQPIB); y en Catalunya, la Agència Pública de Formació i Qualificació Professionals.

Con la colaboración de las comunidades autónomas, en los últimos 4 años se han acreditado más de 717.000 estándares de competencia en España, aunque con una fuerte disparidad territorial. Andalucía lidera los resultados con 219.742 estándares acreditados, duplicando a Catalunya (109.068) y triplicando a la Comunidad de Madrid (70.589), según el Informe sobre el Estado del Sistema de Formación Profesional (2025), publicado por el Ministerio de Educación, Formación Profesional y Deportes.

 
Infografía sobre la los estándares de competencia acreditados
Elaboración propia a partir de datos extraídos del Ministerio de Educación, Formación Profesional y Deportes. 

La acreditación en clave europea: movilidad y oportunidades

La acreditación de competencias profesionales no es una singularidad española, sino una estrategia compartida en toda la Unión Europea para dar valor a los aprendizajes que se adquieren fuera del sistema educativo formal, explica Maria Àngels González, directora ejecutiva de Empleo y Proximidad de Barcelona Activa del Ajuntament de Barcelona.

Desde la Recomendación del Consejo de la UE de 2012, todos los Estados miembros deben poner en marcha mecanismos que permitan a la ciudadanía demostrar lo que sabe hacer, independientemente de cómo lo haya aprendido.

Y es que, además, "para aquellos trabajadores en España que querían irse al extranjero, pero no podían certificar sus habilidades y conocimientos, el procedimiento juega un rol esencial en la movilidad", detalla Arbizu.

En definitiva, el procedimiento de acreditación de competencias se consolida como una herramienta estratégica para la empleabilidad, la cohesión social y la movilidad en el espacio común europeo y, además, "es un derecho de las personas para que se les reconozca aquello que han adquirido", afirma Esther Monterrubio Ariznabarreta, secretaria general de FP en el Ministerio de Educación, Formación Profesional y Deportes en entrevista para Educaweb.

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Noelia Carmona Núñez Redactora
Soy periodista, redactora y editora de contenidos en Educaweb, donde también gestiono las redes sociales corporativas.

Estudié el Grado en Periodismo en la Universitat Autònoma de Barcelona con Mención en Periodismo Especializado en Cultura y Sociedad. Trabajo en Educaweb con la ilusión de informar a las personas para que tomen decisiones sobre su futuro académico y profesional a través de nuestras publicaciones sobre formación, educación y empleo.
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