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La orientación profesional en tiempos de crisis

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Inmaculada Rosa Pina. Máster en Orientación Profesional. Orientadora laboral en la Mancomunidad de Municipios "Monte Ibérico" (Albacete)
Manuel tiene 53 años, es la primera vez que está desempleado tras una experiencia profesional de más de 25 años en el sector de la construcción, abandonó la escuela cuando tenía 11 años, como hacían todos los chicos de su pueblo para ayudar a sus familias, por ello tan sólo cuenta con un certificado de estudios primarios del que apenas recuerda el año en que lo obtuvo y mucho menos dónde lo guardó. No tiene currículum vitae ni se ha enfrentado a una entrevista de trabajo y jamás ha sentido la necesidad, ni las ganas, de sentarse frente a un ordenador a pesar de la insistencia de sus hijos. Manuel necesita trabajar, se niega a creer que no exista una oportunidad para él y decide asistir al servicio de orientación para que le ayuden a encontrar trabajo.

Tras una primera sesión de orientación laboral se le informó de que dadas las circunstancias actuales, le sería muy difícil encontrar un empleo si antes no adquiría una cualificación mínima que le permitiera cambiar de sector, además de adquirir y desarrollar habilidades para buscar empleo de manera activa y autónoma. En primer lugar tendría que matricularse en un Centro de Enseñanza de personas adultas para Obtener el Graduado en Educación Secundaria Obligatoria, también se le recomendó realizar un curso de formación para el empleo o continuar un Ciclo Formativo. Por supuesto tendría que aprender a manejar el ordenador y navegar en Internet porque existen múltiples recursos en la red que le facilitarían la búsqueda de empleo y formación. Se le informó incluso de los programas mixtos de que combinan cursos practicas laborales ofertados por los servicios públicos de empleo.

Manuel se quedó perplejo, y dijo: y todo esto ¿cuánto tiempo me va a llevar?, creía que aquí me ayudarían a encontrar trabajo y usted sólo me manda a la escuela como si fuera un niño, cuando haya terminado todo lo que me dice que debo hacer ya estaré a punto de jubilarme, así que ¿sabe si podría cobrar algún tipo de ayuda económica hasta que llegue ese día?

Manuel es un reflejo de los miles de casos similares que recibimos a diario en los servicios de orientación profesional, como consecuencia de la crisis económica y los cambios que está experimentado el mercado laboral. En ocasiones los orientadores nos vemos desbordados ante situaciones de este tipo, en las que el punto de partida es una persona que por su trayectoria vital se encuentra alejado del perfil profesional solicitado por las empresas actualmente.

Resulta obvio que como Orientadores laborales, hemos de facilitar a la persona la toma de decisiones sobre la reconducción de su carrera profesional conforme a las exigencias de la producción, pero sin perder nunca de vista, sus propias capacidades, intereses, conocimientos y experiencias previas.

Por ello uno de los principales retos para la orientación profesional dirigida a adultos y es facilitar la toma de decisiones sobre la carrera profesional centrando todo nuestro esfuerzo en motivar y animar a la persona para la adquisición de nuevas competencias a través de la formación, pero siempre planteando un itinerario realista y tratando de encontrar aquellos recursos más accesibles que se adapten a sus necesidades y posibilidades de éxito.

Es fundamental que los/as profesionales de la Orientación Profesional conozcan en profundidad los recursos a disposición del usuario para emprender un itinerario personalizado de formación, además de un amplio conocimiento de la situación actual del mercado laboral y la prospectiva de empleo para las diferentes ocupaciones

Afortunadamente contamos cada vez con un mayor número de recursos para el desarrollo de nuestra profesión y para el acceso de los usuarios en general, como los portales de orientación, las ofertas de empleo en Internet y las redes sociales.

Además el Sistema Educativo actual es permeable, es decir, permite que cualquier persona, que abandonara sus estudios sin completar las etapas obligatorias que dan acceso a una educación posterior, pueda entrar de nuevo en el sistema realizando diversos itinerarios o pruebas. Con ello se pretende favorecer la educación permanente, a lo largo de toda la vida, y dar respuesta así al incremento de la demanda de personal cualificado por parte de las empresas, además de ofrecer a la población la posibilidad de modificar su proyecto personal, adquirir nuevos conocimientos y progresar profesional y personalmente.

La Formación Profesional se organiza a través de un Sistema Nacional de Cualificaciones Profesionales, que se divide a su vez en dos grandes subsistemas. El subsistema de FP en el Sistema Educativo, dependiente del Ministerio de Educación. El subsistema de la FP para el empleo que depende del Ministerio de Trabajo. Ambos subsistemas tienen un referente común para programar acciones formativas, las Cualificaciones Profesionales, recogidas y actualizadas periódicamente en el Catálogo Nacional de Cualificaciones Profesionales. Cada Cualificación, comprende un conjunto de competencias profesionales que pueden adquirirse por las vías formales de formación, cursando Módulos profesionales (Sistema Educativo) o Módulos Formativos (Formación profesional para el empleo), incluidos a su vez en Ciclos Formativos o Certificados de Profesionalidad, o través de la experiencia laboral. Esta unificación de criterios permite que posibilidad de acumular, capitalizar y transferir conocimientos con independencia de las vías de obtención.

No cabe duda de que tenemos a nuestra disposición infinitud de opciones que ofrecer a nuestros usuarios y diferentes vías para que puedan alcanzar su objetivo profesional. Si pretendemos realizar una orientación de calidad tendremos que hacer frente a un reto más difícil: hacer que resulte atractivo, transmitir los conocimientos y habilidades necesarias para que cualquier persona pueda acceder a todos estos recursos, convencer de la importancia de la formación y aportar motivación, ánimo y serenidad a quienes como Manuel deben plantearse de nuevo la pregunta que le hicieron de niño, y tú ¿qué quieres ser de mayor?

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