Elegir qué camino se ha de seguir para alcanzar las expectativas profesionales no resulta una tarea fácil. Cuestiones sobre si se está capacitado o capacitada para un determinado itinerario académico o si el itinerario elegido satisface sus intereses y gustos vocacionales, normalmente, genera angustia a los estudiantes. Por otro lado, esta angustia aumenta a medida que el nivel de estudios va siendo superior y que la idea de una elección de estudios incorrecta conllevaría importantes consecuencias.Así pues, es imprescindible que los estudiantes entiendan que esta angustia, que en algunos es ansiedad, está provocada por el temor a equivocarse, a decepcionarse a sí mismos y a sus familias, a lo que ellos y ellas sienten como pérdida de tiempo y la duda sobre la posibilidad de encontrar empleo en aquello que han elegido al terminar sus estudios. Comprender esto les ayudará a manejar estos pensamientos negativos y evitar el estrés que supone la responsabilidad de tomar una buena decisión.
Acciones para que los jóvenes conozcan sus emociones y tomen decisiones académicas bien fundamentadas
En el caso del Colegio Legamar en particular, es prioridad el cuidado emocional de nuestro alumnado. Pensamos que se favorece así el bienestar personal, la convivencia y refuerza una manera positiva de aprender y tomar decisiones.
El departamento de orientación planifica diversas actuaciones grupales dentro del plan de acción tutorial, plan de convivencia y jornadas de la salud, que están dirigidas a ese cuidado, pues consideramos necesario dotar al alumnado de las herramientas necesarias para hacer frente a las situaciones cotidianas propias de su edad, entre las que destacamos la dificultad de tomar decisiones académicas.
También se realizan vídeos (Piensa y decide) dirigidos a todos los estudiantes, en los que se les facilitan reflexiones y técnicas de afrontamiento emocional. Además, a través de convocatorias (webinars), las familias tienen ocasión de compartir y preguntar sobre los temas tratados. Asimismo, en 2º de Bachillerato desarrollamos un Taller de relajación para controlar la ansiedad, los pensamientos negativos y cómo reducirlos.
Por otro lado, el alumnado se reúne en tutorías individuales, ya sea con el tutor o tutora, o bien con la orientadora del centro, en las que comparten sus preocupaciones, se les aporta estrategias de afrontamiento ante las dificultades que están pasando y se les facilita técnicas de reestructuración cognitiva. Asimismo, desde el departamento de orientación se proponen, si procede, actuaciones concretas a los equipos docentes o a las familias para reforzar esa ayuda individualizada.
¿Quiénes deberían implicarse en el acompañamiento emocional de los jóvenes para que afronten las decisiones sobre su futuro?
Los agentes implicados en el acompañamiento emocional del alumnado son, por un lado, los padres, madres y amigos de la familia. Estos actúan como referentes respecto a los perfiles profesionales y las habilidades necesarias para su desempeño. Además, les pueden facilitar a los alumnos la posibilidad de conocer in situ sus empresas para que todo esfuerzo les resulte más motivador.
Por otro lado, la dirección del centro también juega un papel fundamental al autorizar el desarrollo de proyectos de inteligencia emocional en la comunidad educativa, facilitar recursos para la mejora del autoconocimiento y la motivación, y favorecer la formación respecto a estos ámbitos al profesorado y otros especialistas.
Por supuesto, los integrantes del departamento de orientación también se implican en el acompañamiento emocional de los jóvenes, los acompañan a lo largo de las diferentes etapas educativas diseñando e implementando actividades que les ayudan a gestionar sus emociones y tomar decisiones bien fundamentadas. Finalmente debo citar a antiguos alumnos, así como diferentes instituciones (fundaciones, universidades, empresas, ayuntamientos…) que colaboran con nuestro centro haciendo posibles diferentes actividades motivacionales.
Respecto a cómo se está cuidando en los centros educativos el bienestar emocional y la capacidad de tomar decisiones del alumnado con trastornos mentales y de conducta, en nuestro colegio el seguimiento de estos perfiles y las directrices que se han de seguir para ayudarles están pautadas por la psicóloga del centro y los tutores. Es muy importante además la comunicación con las familias. La cooperación entre todos los agentes implicados en su educación generará en estos estudiantes seguridad y les permitirá ser resilientes a la hora de tomar sus decisiones académicas y profesionales.
