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Adaptar los postgrados a la situación actual es un "must" para las Escuelas

Artículo de opinión


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Nines Calle Maestro. Directora de Expansión y Clientes de ITAE, Escuela de Negocios (Badajoz)
A estas alturas del partido, nadie cuestiona que las empresas y organizaciones que sobreviven son las que han sabido adaptarse a la nueva situación económica, a la demanda actual del mercado. No han seguido adelante sólo las más fuertes, sino también muchas PYMES que se han reinventado, han virado y han visto oportunidades donde parecía que sólo había rechazo.

Este mismo desafío es el que están afrontando las Escuelas de Postgrados con sus programas. Si hace unos años tener un postgrado / máster era prácticamente una garantía de empleo y de un salario determinado, en los últimos años ha dejado de ser así. Pero no malinterpretemos los datos.  Como se demuestra en diversos estudios, como "La empleabilidad de la Población Cualificada 2012", los alumnos que cuentan con un postgrado /máster   tienen un nivel de empleabilidad mayor al 200% que el total de población activa. Y la tendencia sigue en ascenso.  La última encuesta "2013 Corporate Recruiters Survey Hiring Report" realizada por el Graduate Management Admission Council (GMAC) aporta una tendencia especialmente  interesante para los posgraduados. Según los datos publicados en mayo  de 2013, no sólo mejorará el porcentaje de alumnos que consiguen trabajo al finalizar, sino que los nuevos postgraduados también verán aumentados sus salarios con respecto a alumnos de promociones anteriores. En este sentido, los MBA siguen a la cabeza en cuanto a salarios en comparación con otros másters en Management, Finanzas, Marketing, etc.

Pero, al igual que otras empresas e instituciones, quienes diseñamos y comercializamos  programas de posgrado, estamos reorientando la oferta para que los alumnos sean conscientes de esta tendencia y confíen en los resultados a medio plazo.

¿Qué hacer para volver a generar confianza?

- Comenzar por algo tan sencillo como demostrar la evidencia, hacerles llegar estas estudios como los mencionados u otros similares para que venzan el manido pensamiento de "para que estudiar más si está todo fatal"

- Incluir en el diseño de los másters una mayor dosis de habilidades personales, herramientas que les sirvan para hacer frente a problemas, que les aporten seguridad, que les hagan abordar proyectos y su propio proyecto de vida con creatividad y entusiasmo.

- Ofrecer programas internacionales para que los estudiantes se habitúen a vivir e interactuar con otras culturas, otros países y otros mercados, ya que es muy posible que desde el inicio de su carrera profesional tengan que hacerlo.

- Gestionarles buenas prácticas en empresas donde puedan aportar sus conocimientos y su saber hacer y que puedan ser pre-empleo.

- Hacer una labor de Coaching con cada participante desde el inicio de su relación con la escuela, gestionando sus expectativas, ayudándole a orientar su carrera en base a sus puntos fuertes y capacidades.

Poniendo en práctica estas ideas, en ITAE hemos reconvertido nuestro tradicional MBA en un MBA Internacional Hispano Luso (MBA IHL) que se cursa un semestre en Badajoz y un semestre en Lisboa. Hacemos un coaching personal y profesional con cada uno de los participantes porque los grupos son reducidos, unos 15 alumnos por clase. Y pueden hacer sus prácticas en el país que quieran, ya que además del nivel de inglés con el que habitualmente vienen de sus carreras, estudian portugués durante todo el año y consiguen un nivel muy bueno al finalizar.

El principal valor añadido que deben ofrecer los másters y postgrados es la DIFERENCIACIÓN. Todos los días las empresas recibimos decenas de currículos. ¿Por qué voy a fijarme en uno u otro si en el 90% de los casos son similares? Lo que deben entender los jóvenes es que ahora hay perfiles muy interesantes con experiencia que se han quedado sin trabajo y que son su competencia en el mundo laboral.
Por eso, más que nunca deben ser proactivos, continuar preparándose para ser más competitivos y empezar esta carrera de búsqueda de empleo habiendo conseguido estar en la "pole" en la fase preparatoria.

Son muchos los conceptos que incluiría en el valor añadido que genera un máster o postgrado, eso sí, siempre que sean prácticos y no una mera continuación teórica de la carrera universitaria. Conceptos como confianza, visión global, capacidad de decisión, mentalidad de cambio, adaptación a distintos mercados y países, liderazgo, cooperación, soluciones…

La fórmula Universitario + Máster diferencial + Prácticas en empresa + Idiomas = Multiplicar exponencialmente empleabilidad.

En definitiva hacer un Máster/posgrado,  con los valores mencionados,  sigue siendo una excelente inversión. Así lo demuestran también las estadísticas de empleo del MBA Internacional Hispano Luso de ITAE.
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