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Ideas para fomentar el consumo responsable de juguetes
Artículo de opinión
Material de fabricación
Uno de estos factores es el material con el que se fabrican los juguetes.
En primer lugar, es aconsejable seguir la regla de la tres Rs:
- Reducir: utilizar recursos sólo cuando sea necesario.
- Reutilizar: dar uso a un objeto hasta que, verdaderamente, no tenga ningún tipo de utilidad.
- Reciclar: recuperar los materiales con que se ha hecho algún objeto que ya no sirve para nada y transformarlos para que puedan tener otra utilidad
En segundo lugar, es importante tener presente con qué tipo de material se han fabricado los juguetes:
-Plástico ABS: este material se usa a menudo para fabricar piezas de construcción y ordenadores de juguete. Los juguetes hechos con este material no suponen ningún riesgo de salud para las criaturas pero sí que lo es el uso de alguno de sus componentes para el personal que lo maneja durante el proceso de fabricación.
-P.V.C.: este material es perjudicial por la presencia de cloro y por las dioxinas que se liberan durante el proceso de sintesis. Existen mordedores y tetinas que están hechos de este material y suponen un riesgo para la salud de los más pequeños. Es necesario buscar alternativas como el látex o el caucho natural.
-Embalajes: Una manera de cumplir la primera regla del principio de la tres Rs es escoger juguetes sin embalajes sobrantes.
Producción globalizada vs producción local
La producción de juguetes que encontramos en el mercado es muy variada: des de producciones "globalizadas” hasta producciones locales, pasando por juguetes artesanales.
La producción de juguetes "globalizada” se caracteriza porque su proceso de elaboración se lleva a cabo en diferentes países, por ejemplo: fabricación en el Reino Unido, impresiones en la UE, piezas de China, EUA entre otros... Pero ésta no es su característica principal; grandes empresas del Norte se ahorran gastos de personal trasladando sus manufacturas a pequeñas empresas del Sur donde el sueldo de los trabajadores es muy bajo y se maximiza la productividad de dichos trabajadores. De esta manera, el precio que pagamos por los juguetes producidos "globalmente” es más bajo que si los juguetes se hubieran fabricado de manera local.
La producción local es la que utiliza recursos más cercanos, de su entorno geográfico. La competencia entre productores locales y productores de juguetes "globalizados” es muy compleja. Por un lado, los precios de los juguetes de producción "globalizada” son más bajos y se importa una gran cantidad de éstos, aproximadamente el 70%. Sin embargo, los juguetes de producción local satisfacen mejor la demanda "a medida” de escuelas y pequeños distribuidores, cumplen mucho mejor las medidas de seguridad y su calidad, a nivel didáctico, es mucho más elevada que la de los juguetes importados.
En cuanto a la producción artesanal, se caracteriza porque la encontramos en ferias de productos artesanales, los juguetes están hechos de madera y en talleres domésticos, no son juguetes "perfectos”- a veces tienen algún rasguño o no tienen una forma exacta y repetida- y son el resultado de un trabajo hecho a mano, con mucha dedicación y cuidado.
Juguetes para crecer
Cuando vayamos a comprar un juguete lo haremos bajo criterios de responsabilidad porque sabemos que el juguete será una herramienta para el aprendizaje y desarrollo de nuestros niños y niñas. Con el juego los más pequeños desarrollan su motricidad, creatividad, sociabilidad y inteligencia, para aprender a encontrar su lugar en la sociedad mientras se forman como personas.
Algunos aspectos a tener en cuenta cuando compremos un juguete son:
- Los intereses de nuestros niños y niñas. Un juguete tiene que ser divertido para ellos.
- El juguete tiene que ser adecuado a la edad del pequeño. Si es demasiado complicado no lo va a entender.
- El juguete tiene que estimular al niño o a la niña en diferentes aspectos: creativo, socializador, cooperativo y propio
- Tiene que ser un juguete seguro y, por lo tanto, tiene que cumplir la normativa de la CE.
- Los juguetes tienen que ser sólidos para que, a pesar del paso del tiempo, tengan la mayor duración posible.
- Los juguetes tienen que ser los justos para que los niños no se "ahoguen” y sepan valorar las cosas.
- Los juguetes tienen que ser de tipología variada para que puedan aprender más.
- Un juguete no tiene que reproducir ningún estereotipo de género.
- Evitemos comprar juguetes que hagan referencia a temas bélicos.
- No hace falta que un juguete juegue solo. A los niños les gusta jugar con los juguetes y no ser un espectador.
- Intentar que el juguete sea respetuoso con el medio ambiente.
Para poder hacer esta buena compra tendremos que vigilar con:
- La publicidad, que puede ser engañosa.
- El precio, si es el adecuado al producto que tenemos en nuestras manos.
- Las necesidades del juego: número de participantes, espacio...
- Que sean juegos para el uso compartido de toda la familia. Así es más divertido.
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