El aprendizaje es básico para la subsistencia y para la evolución de la especie, modifica y transforma las estructuras y así, permite la realización de nuevos aprendizajes de mayor complejidad.
Este acto de aprender, puede producirse de distintas formas:
- aprendizaje por imitación (típico en edades infantiles)
- aprendizaje por observación
- aprendizaje por ensayo-error…
De ahí, que existan múltiples teorías del aprendizaje: Teorías Asociacionistas de condicionamiento clásico (Pavlov), de condicionamiento instrumental operante (Thorndike), Teorías Cognitivas, Gestalt, etc.
Cada una de estas teorías incide en una característica peculiar de los procesos de aprendizaje: unas en procesos de equilibración (Piaget), otras toman como elemento esencial la instrucción, otras teorías se apoyan en el papel importante que juega el medio social y cultural donde se desarrolla en individuo, etc.
Así vemos que cada una de estas formas de aprendizaje está determinada por las edades de los sujetos (no aprende igual un bebé que un universitario, ni lógicamente utilizan las mismas estrategias), por el lugar o contexto donde se encuentra el sujeto (colegio, empresa, entorno familiar…) ni la necesidad por la que se establece dicho aprendizaje, de ahí que cada vez se dé más importancia a los mecanismos o técnicas que posibiliten que el individuo aprenda, ya sea a nivel educacional (programas de técnicas de estudio) como a nivel profesional (en las empresas se utilizan con mayor frecuencia técnicas de aprendizaje para los empleados, por ejemplo para el reciclaje profesional), pero se plantea ya un aprendizaje más dinámico, un modo de aprender más activo, es decir, dejamos de lado la enseñanza específica y concreta y pasamos a dar pautas o técnicas de "aprender a aprender” independientemente de las materias o habilidades que necesitemos incorporar a nuestro conocimiento y que serán de aplicación a diferentes campos o situaciones.
Lo que se plantea en la actualidad es que se produzca un aprendizaje significativo: el "alumno” ha de construir su conocimiento sobre cómo utilizar los procedimientos y además ha de poder representarse el cuándo, dónde y por qué utilizarlos y en qué medida favorece este uso para la resolución de una tarea. Así, tendremos que "enseñar” el uso estratégico de los procedimientos a utilizar, partir de los conocimientos declarativos, procedimentales y condicionales previos de los alumnos, tratar un conjunto de procedimientos similares (correspondientes a la misma habilidad básica) dentro de una complejidad creciente de situaciones de aprendizaje
Hay que intentar que el sujeto que está inmerso en un proceso de aprendizaje, ya sea en ámbitos académicos, profesionales o incluso personales, pueda adquirir las habilidades necesarias para que de forma independiente puede ser actor de su propio aprendizaje.
De esta forma, lograremos que el individuo utilice dichas estrategias en cualquier situación de aprendizaje; la idea es que el sujeto sepa utilizar una serie de procedimientos independientemente del contexto de adquisición de nuevos conceptos en el que esté actuando:
- el alumno que se tiene que enfrentar a unos temarios para luego hacer frente a unos exámenes o pruebas donde tendrá que demostrar si ha adquirido esos conocimientos,
- el profesional que en su trabajo necesita aprender nuevos conceptos, materias o procedimientos para desarrollar su labor porque le son exigidos, por ejemplo para una subida de puesto.
- A nivel personal, ante nuevas situaciones que exigen un cambio en la forma de actuar.
En todos estos casos, existiría cierta similitud a la hora de aprender: hay que intentar sistematizar una serie de pasos para llegar al fin perseguido:
1.- Elaborar y organizar la información que nos llega y que nosotros tenemos
2.- Conocer, controlar y regular la aplicación de los procedimientos a seguir.
3.- Ejecutar dichos procedimientos.
4.- Evaluar la acción que hemos emprendido (éxito o fracaso) para futuros procesos que emprendamos.
Por ello, en la actualidad, los procesos de aprendizaje pasan por hacer que los sujetos aprendan a aprender y no simplemente recibir información puntual y específica de procesos concretos, de esta forma lograremos una mayor capacidad de adaptación a las diferentes y cada vez más complejas situaciones en las que el hombre tendrá que aprender para seguir con su evolución.