Si quieres trabajar en el sector público, el primer paso es conocer en qué consiste una oposición y cuáles son los requisitos para participar en este tipo de procesos selectivos.
Infórmate a continuación sobre las características de los procesos selectivos para el acceso al empleo público, los requisitos que necesitas cumplir para opositar y los diferentes sistemas de selección.
Además, debes conocer en detalle cada una de las fases del proceso y realizar una buena preparación previa
¿Qué es una oposición?
Una oposición es un proceso de selección para acceder a los puestos de trabajo de la Administración pública.
Cuenta con una serie de fases que deben seguirse en los plazos establecidos para poder superar con éxito el proceso.
Incluye una serie de pruebas o exámenes, diseñados para evaluar los conocimientos, aptitudes y competencias de los aspirantes.
Este sistema está basado en los principios de igualdad, mérito y capacidad, garantizando que los candidatos son evaluados de la forma más imparcial posible.
En función de la profesión que quieras ejercer dentro de la Administración pública deberás realizar unas pruebas u otras.
Dependiendo de la vinculación con la Administración que se establezca en la oferta accederás a la función pública como funcionario o como personal laboral.
En cada proceso se convocará un número de plazas determinado, que puede variar entre una vacante a varios cientos de plazas.
Las convocatorias de promoción interna se dirigen exclusivamente a personas que ya estén trabajando en la Administración pública. En las de turno libre, en cambio, puede participar cualquier candidato o candidata que cumpla con los requisitos.
La oferta de empleo público se anuncia en el Boletín Oficial del Estado o en los diarios oficiales de las comunidades autónomas. Posteriormente, el organismo público correspondiente publica las convocatorias y sus bases. Estos organismos pueden ser:
-
Administraciones autonómicas
-
Administraciones locales (diputaciones y municipios)
¿Qué requisitos debo cumplir para presentarme a una oposición?
Para presentarte a una oposición es necesario que cumplas con los requisitos que se establecen en cada convocatoria.
La mayoría de oposiciones tienen requisitos específicos que varían de un proceso a otro, pero los requisitos generales más comunes están relacionados con:
-
Nacionalidad: dependiendo del proceso será obligatorio tener la nacionalidad española o de algún estado mimbro de la Unión Europea.
-
Edad: generalmente se establece un mínimo de 16 años y no superar la edad máxima de jubilación.
-
Capacidad funcional: tener la capacidad física y psíquica necesaria para el desempeño de las funciones del puesto.
-
Habilitación legal: no estar inhabilitado para el acceso al empleo público.
-
Titulación académica: es imprescindible contar con la titulación exigida en la convocatoria.
Otros requisitos que pueden exigirte dependiendo del puesto al que optes son: estar en posesión del carné de conducir, haber superado pruebas físicas, tener una altura mínima, acreditar un nivel determinado de la lengua cooficial de tu comunidad autónoma, etc.
|
Cada convocatoria concreta puede establecer requisitos adicionales según el tipo de plaza y la Administración convocante, por eso siempre hay que revisar en detalle las bases de la oposición. |
Tipos de procedimientos selectivos para el acceso al empleo público
Dependiendo de las fases que incluya, el proceso selectivo puede estar estructurado de tres maneras diferentes:
-
Oposición "pura": únicamente se valoran las pruebas realizadas por el opositor. La calificación obtenida en los diferentes exámenes es la que determina si se obtiene la plaza.
-
Concurso de méritos: no incluye exámenes ni pruebas, se valoran exclusivamente los méritos de los candidatos, como su experiencia laboral, titulaciones académicas o antigüedad en la Administración.
-
Concurso-oposición: es una combinación entre pruebas y méritos en la que se asignan puntuaciones en ambas fases. El peso específico de cada fase, el orden, el tipo de pruebas y los méritos a valorar dependerán de cada Administración y se detallarán en las bases del proceso selectivo.
¿A qué tipos de exámenes puedo enfrentarme en una oposición?
En función de los puestos de trabajo convocados tendrás que realizar unas pruebas u otras. Cada convocatoria establece qué exámenes se realizan, su orden y su carácter eliminatorio o no. Por ello, es fundamental leer con detalle las bases de la convocatoria.
Los exámenes pueden presentarse en formato oral o escrito.
Algunos de los tipos de pruebas con los que te puedes encontrar son:
-
Test. Se trata de un listado de preguntas de opción única u opción múltiple de respuesta. Por lo general, las preguntas contestadas de forma incorrecta restan a la puntuación final.
-
Preguntas de desarrollo. Son preguntas abiertas que los opositores responderán de forma oral o escrita. Este tipo de preguntas evalúa el dominio amplio de los contenidos del temario y la capacidad para estructurar correctamente la información.
-
Casos prácticos. En este tipo de prueba se plantean situaciones reales asociadas a las funciones del puesto de trabajo al que se quiere acceder. Evalúan la capacidad de aplicar los conocimientos teóricos a la práctica y la resolución de problemas.
-
Prueba de informática o de dominio de competencias digitales. Sirve para evaluar las competencias digitales del candidato, especialmente aquellas que están relacionadas con el desempeño del puesto, como el conocimiento de software de ofimática, herramientas de gestión o bases de datos.
-
Pruebas físicas. Son obligatorias en oposiciones a policía, bombero o agente forestal, entre otras. Pueden ser de resistencia, fuerza, agilidad o velocidad. Suelen establecer baremos distintos para hombres y mujeres.
-
Entrevistas personales. Su objetivo es profundizar en la personalidad del candidato y conocer su motivación, capacidad de comunicación, madurez, adaptación al puesto y conocimientos generales sobre la institución.
-
Psicotécnicos. Estas pruebas permiten valorar la idoneidad del candidato al puesto ofertado. Evalúan aptitudes como el razonamiento verbal o matemático o la orientación espacial, así como rasgos de personalidad.
-
Reconocimiento médico. Para el acceso a algunos puestos de trabajo se solicita un informe médico que garantice que el aspirante se encuentra en las condiciones físicas y psíquicas adecuadas para ocupar el cargo.
-
Prueba de idiomas:
-
Lengua castellana: obligatoria si el aspirante no tiene nacionalidad española o no acredita formación previa en castellano.
-
Lengua cooficial: en comunidades autónomas con idioma propio (catalán, gallego, euskera, valenciano, etc.) se puede exigir una prueba de nivel.
-
Idioma extranjero: esta prueba suele incluir ejercicios de traducción, comprensión lectora, redacción y, en ocasiones, una entrevista oral. Es habitual en oposiciones al Cuerpo Diplomático o a técnico de Hacienda, entre otras.
-
Ten en cuenta que el proceso puede contemplar la posibilidad de exención de alguna prueba en el caso de que se puedan acreditar de otro modo los conocimientos que evalúa. En las bases de cada convocatoria se detallan las posibles exenciones.
Consulta las convocatorias abiertas de empleo público en la página oficial de la Administración General del Estado (AGE) y en las páginas web de tu provincia y de tu comunidad que publiquen esa información.
Consulta qué profesiones puedes ejercer con una oposición, qué tipos de empleado público existen y también infórmate detalladamente sobre cómo prepararte unas oposiciones.
En el caso de que quieras prepararte para oposiciones en organismos internacionales será indispensable que puedas demostrar el dominio de un idioma extranjero como inglés, francés, alemán o italiano, entre otros.
