La Fundación Jaume Bofill ha presentado su Anuario 2013: La situación de la educación en Catalunya, en el que se analizan los indicadores del éxito escolar y se establecen una serie de recomendaciones para mejorar el sistema educativo y reducir el fracaso escolar. La principal conclusión que puede extraerse del informe es que Catalunya ha mejorado sus resultados educativos globales desde 2008, año en que empezó la crisis económica.A pesar de este resultado positivo, el informe destaca que es necesario aumentar la inversión para no retroceder en los resultados, ya que el presupuesto destinado a la educación en Catalunya es un 25% inferior a la media europea. Entre 2009 y 2011 el presupuesto liquidado del Departament d'Ensenyament de la Generalitat se ha reducido un 6,9% y el gasto público por estudiante ha bajado en 493,5 euros, más del 10%. El informe pone como ejemplo a comunidades como País Vasco o Navarra, que destinan 2.309 y 1.686 euros más, respectivamente, por alumno que Catalunya.
Otro dato positivo es el incremento de jóvenes que deciden retomar sus estudios. Así, en 2012, el 21% de las personas de entre 16 y 29 años se ha reincorporado al sistema educativo después de abandonarlo durante el periodo de 2008-2012. Además, el informe muestra que se ha incrementado en 2,41 puntos porcentuales el número de alumnos que obtienen el título de ESO; en 5,5 puntos los jóvenes de 20 a 24 años que tienen estudios secundarios postobligatorios y en 7,6 los que a los 20 años continúan estudiando.
El informe destaca el papel clave del profesorado en la mejora de los resultados educativos y pone valor al esfuerzo realizado por los docentes para hacer frente al incremento de horas de docencia, las ratios más elevadas, la escasez de personal y la reducción de salario.
Por último, los autores muestran un retroceso en la demanda de formación a lo largo de toda la vida. En este sentido, Catalunya ha pasado de un 10% de los adultos formándose en 2010, a un 8,8% en 2012, un porcentaje por debajo de la media española (10,7%) y muy alejado del objetivo del 15% de la estrategia Europa 2020.