Según el informe Datos y cifras del sistema universitario español del Ministerio de Educación, Ciencia y Deporte, las universidades padecen una elevada dependencia de los estudiantes de su misma comunidad autónoma, debido a la alta dispersión territorial de centros universitarios, y a la amplia y generalista oferta de titulaciones universitarias. En los centros universitarios de 10 comunidades más del 90% de sus estudiantes proceden de la misma comunidad en la que está ubicada la universidad.Asimismo, del informe se extrae que a pesar de que Andalucía, Catalunya, Madrid y Comunidad Valenciana son los territorios con menor índice de movilidad académica por parte del alumnado, también son las comunidades que más estudiantes extranjeros atraen.
El texto señala que los estudiantes universitarios españoles apenas se mueven de su comunidad autónoma para realizar sus estudios, y cuando lo hacen es a comunidades fronterizas, sin que ello requiera, en la mayoría de los casos, cambio de residencia. Este es el caso de Castilla La Mancha, que a pesar de ser, junto con La Rioja, una de las comunidades autónomas con mayor índice de movilidad teórica,- sólo el 50,3% y el 48,4%, en el caso de La Rioja, de sus estudiantes residentes estudian en esa comunidad-, ello no significa movilidad real ya que, el 33,1% de los estudiantes con residencia en esa comunidad acuden a realizar estudios universitarios a Madrid, sin que ello suponga modificación de la residencia.