Sergi Escandell Triola es profesor del CFGS de Marketing y Publicidad y director del CEFP Núria, centro educativo fundador de MetaFP.
1. ¿Cuál es el ciclo formativo más demandado dentro de esta familia profesional y a qué factores atribuye su atractivo?
El ciclo formativo más demandado es el de Grado Superior en Marketing y Publicidad. Se trata de un ciclo muy completo que abarca todos los ámbitos de la comunicación comercial.
Este amplio abanico de contenidos lo convierte en una opción especialmente atractiva frente a otros ciclos más específicos.
Como su nombre indica, incluye módulos dedicados al marketing, como políticas de marketing, donde se profundiza en los fundamentos de la disciplina, y marketing digital, una de las áreas con mayor proyección profesional para nuestros estudiantes.
Además, se trabaja en profundidad la publicidad y consecuentemente la relación con los medios de comunicación. También la organización de eventos y el protocolo institucional y empresarial, imprescindible para el buen funcionamiento de cualquier empresa.
El ciclo también incorpora contenidos de investigación y análisis de mercados, fundamentales para la toma de decisiones estratégicas. Por supuesto, no se dejan de lado áreas clave como la atención al cliente, la comunicación corporativa y la gestión del servicio pre y postventa, esenciales en cualquier estrategia comercial.
Finalmente, destaca la presencia de un módulo de diseño gráfico y creatividad publicitaria, que permite a los alumnos desarrollar su faceta más creativa, aportando un valor añadido al perfil profesional de los futuros técnicos de marketing y publicidad. Todo ello conforma un ciclo polivalente, actual y muy valorado por las empresas del sector.
1. ¿Cuál es el ciclo formativo más demandado dentro de esta familia profesional y a qué factores atribuye su atractivo?
El ciclo formativo más demandado es el de Grado Superior en Marketing y Publicidad. Se trata de un ciclo muy completo que abarca todos los ámbitos de la comunicación comercial.
Este amplio abanico de contenidos lo convierte en una opción especialmente atractiva frente a otros ciclos más específicos.
Como su nombre indica, incluye módulos dedicados al marketing, como políticas de marketing, donde se profundiza en los fundamentos de la disciplina, y marketing digital, una de las áreas con mayor proyección profesional para nuestros estudiantes.
Además, se trabaja en profundidad la publicidad y consecuentemente la relación con los medios de comunicación. También la organización de eventos y el protocolo institucional y empresarial, imprescindible para el buen funcionamiento de cualquier empresa.
El ciclo también incorpora contenidos de investigación y análisis de mercados, fundamentales para la toma de decisiones estratégicas. Por supuesto, no se dejan de lado áreas clave como la atención al cliente, la comunicación corporativa y la gestión del servicio pre y postventa, esenciales en cualquier estrategia comercial.
Finalmente, destaca la presencia de un módulo de diseño gráfico y creatividad publicitaria, que permite a los alumnos desarrollar su faceta más creativa, aportando un valor añadido al perfil profesional de los futuros técnicos de marketing y publicidad. Todo ello conforma un ciclo polivalente, actual y muy valorado por las empresas del sector.
"Quienes deseen destacar en el ámbito del comercio y marketing deben tener una vocación comunicativa y una actitud creativa".
2. ¿Cuáles son los tres principales retos que enfrentan actualmente los estudiantes y titulados de la familia de FP Comercio y Marketing, y cómo pueden prepararse para superarlos?
El primer reto al que deben enfrentarse los alumnos de esta familia profesional es la constante evolución del sector. Aunque existe una base teórica y metodológica que permanece relativamente estable y que resulta imprescindible conocer, el ámbito del comercio y el marketing está en continua transformación.
Surgen continuamente nuevas propuestas, actualizaciones, estrategias y tendencias, algunas de las cuales se consolidan, mientras que otras son pasajeras y responden a cambios en los hábitos y preferencias de los consumidores.
Este dinamismo se debe, en gran parte, a la importancia que tiene el público (los clientes) en la planificación comercial y de marketing. Al depender directamente de sus gustos, comportamientos y necesidades, las acciones y planteamientos deben adaptarse continuamente a lo largo del tiempo.
Por ello, la mejor preparación consiste, en primer lugar, en adquirir un conocimiento sólido y exhaustivo de esta disciplina como ciencia social, que sirva de base firme para comprender el funcionamiento de los mercados y las relaciones comerciales.
Posteriormente, es fundamental conocer y analizar una amplia variedad de casos prácticos y ejemplos reales, estudiados desde diferentes perspectivas para poder interpretarlos en su contexto.
Y finalmente, la clave está en desarrollar la capacidad de interpretar de forma precisa y actualizada al consumidor, que es el principal destinatario de cualquier acción de marketing y, a su vez, el elemento más cambiante de todo el proceso.
3. ¿Qué habilidades cree que son imprescindibles para el alumnado que quiere destacar en el ámbito del comercio y marketing?
Sin lugar a duda, es recomendable que los estudiantes que deseen destacar en el ámbito del comercio y marketing cuenten con una vocación comunicativa y una actitud creativa. La capacidad para transmitir ideas, conectar con distintos públicos y proponer soluciones innovadoras resulta esencial en este sector.
No obstante, es importante señalar que muchas de estas habilidades pueden desarrollarse progresivamente a lo largo de la formación. La práctica, el trabajo constante y la exposición a casos reales permiten que, incluso aquellos alumnos que no parten con estas competencias, puedan adquirirlas y perfeccionarlas.
Junto a estas cualidades, resulta imprescindible contar con capacidad de análisis y síntesis, ya que interpretar datos de mercado, extraer conclusiones y detectar oportunidades son tareas habituales en el ámbito comercial y de marketing.
"La clave está en conocer bien las propias capacidades, apostar por la especialización y mantenerse actualizado".
Asimismo, la habilidad para trabajar en equipo y liderar proyectos resulta muy valorada, dado que gran parte de las acciones en este entorno se desarrollan de forma colaborativa.
Otro aspecto esencial es el dominio de las herramientas digitales y los entornos de comunicación online, que hoy en día son imprescindibles para cualquier profesional del marketing. A ello se suma la empatía y la orientación al cliente, cualidades necesarias para comprender en profundidad las necesidades y expectativas del público objetivo.
Desde mi punto de vista, lo primero que recomendaría a cualquier graduado es identificar cuáles son sus fortalezas, intereses y en qué ámbito dentro del comercio y marketing se siente más cómodo y motivado. A partir de ahí, es fundamental trazar un plan profesional en torno a ese ámbito y empezar a especializarse.
Un primer paso puede ser iniciar una carrera laboral en el área elegida, ya sea a través de prácticas, contratos formativos o primeros empleos, que permitan adquirir experiencia real y conocer de cerca el funcionamiento del sector.
Paralelamente, resulta muy recomendable complementar esa experiencia con formación continua, ya que el comercio y el marketing son entornos en constante cambio. Actualmente, existe una gran oferta de cápsulas formativas, workshops y cursos de especialización que ayudan a actualizar y enriquecer el perfil profesional.
Para quienes deseen continuar su formación reglada, mi consejo es que elijan un itinerario académico coherente con sus intereses y objetivos profesionales. En muchos casos, dar el salto a un grado universitario relacionado puede ser una excelente opción, siempre acompañado de prácticas en empresas que permitan afianzar conocimientos y definir con mayor precisión su camino profesional.
En definitiva, la clave está en conocer bien las propias capacidades, apostar por la especialización, mantenerse actualizado y combinar formación teórica con experiencia práctica, ya que este equilibrio es el que mejorará notablemente la empleabilidad y las oportunidades profesionales a medio y largo plazo.