Encuentra tu curso ideal

9%

¿Qué quieres estudiar?

Claves para prevenir el coronavirus entre estudiantes y docentes

Noticia

La OMS, UNICEF y la Federación Internacional de Sociedades de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja publican una guía dirigida a la comunidad educativa para contener el COVID-19 en las aulas


  • Valora

  • Deja tu comentario
Redacción de Educaweb
Actualización: 01.09.2020

En España se han registrado 462.858 casos, según los datos publicados por el Ministerio de Sanidad el 1 de septiembre.  Con el fin de facilitar la prevención y contención del coronavirus en el ámbito educativo y formativo, la Federación Internacional de Sociedades de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja (FICR), la Organización Mundial de la Salud (OMS) y UNICEF han publicado la guía Key Messages and Actions for COVID-19. Prevention and Control in Schools.
 
Las entidades que han elaborado la publicación muestran su preocupación por la expansión de la enfermedad y advierten que su erradicación no puede realizarse a costa de estigmatizar a los estudiantes que hayan estado expuestos al coronavirus.  "Los entornos educativos deben continuar siendo acogedores, respetuosos, inclusivos y de apoyo para todo el mundo", indican en la introducción.

Por otro lado, los organismos internacionales señalan que esta crisis también puede constituir una oportunidad para aprender, cultivar la compasión e incrementar la resiliencia entre todos los miembros de la comunidad educativa.
 
Si bien diferentes entidades oficiales de España han desarrollado guías para afrontar el coronavirus desde diferentes ámbitos, incluido el educativo, la guía Key Messages and Actions for COVID-19. Prevention and Control in Schools aborda el tema desde una perspectiva global y validada por organismos internacionales, con consejos tanto para el profesorado, como para las familias y los propios estudiantes.
 

Consejos para el equipo directivo, el profesorado y el personal de administración y servicios

 
De cara a los responsables de la educación, las organizaciones ofrecen algunos consejos básicos como no permitir que personas enfermas acudan a la escuela, promover el lavado regular con agua y jabón o alcohol sanitario, realizar una desinfección diaria de los espacios y promover la distancia social.
 
En primer lugar, se recomienda mantenerse informado a través de fuentes oficiales como la Organización Mundial de la Salud, UNICEF o los ministerios de Sanidad.
 
También es fundamental actualizar o desarrollar planes de emergencia y contingencia, lo que incluye replantearse la realización de eventos o encuentros comunitarios. De hecho, cuando se recomienda mantener prácticas de distancia social, se insiste en cancelar asambleas, acontecimientos deportivos y otros eventos que comporten una gran afluencia de público; así como escalonar la entrada y salida de las clases, dejar un metro y medio de separación entre estudiantes siempre que sea posible y evitar los contactos físicos innecesarios.

Los autores de la guía aconsejan establecer procedimientos coordinados con las autoridades sanitarias para saber cómo actuar en caso de detectar un caso de enfermedad, y cómo informar a las partes involucradas, incluidos los propios estudiantes.
 
Controlar el absentismo y planificar la continuidad del proceso de enseñanza y aprendizaje constituyen otros aspectos a tener en cuenta. Sobre este último aspecto se recomienda:
 
  • Usar estrategias de enseñanza online
  • Asignar lecturas y ejercicios para hacer en casa
  • Consultar programas audiovisuales o podcast con contenido educativo
  • Establecer turnos para realizar un control remoto de los estudiantes
  • Revisar o desarrollar estrategias educativas aceleradas.
 
Los responsables de la educación y formación de los estudiantes también han de tener en cuenta las necesidades psicosociales de los estudiantes, atendiendo a sus preguntas y preocupaciones de forma adecuada a su edad, así como tener en cuenta el alumnado con necesidades especiales o en situación vulnerable.
 

Deberes para las familias: mantenerse informadas e informar en caso de positivo

 
Además de mantenerse informadas a través de fuentes oficiales, las familias tienen el deber de reconocer los síntomas del COVID-19, acudir a los servicios sanitarios e informar al centro educativo en caso de positivo.
 
Es muy importante colaborar con el profesorado a la hora de enseñar a los más pequeños a lavarse las manos de manera adecuada, cubrirse con un pañuelo o con el codo cuando se tosa o no tocarse los ojos, la nariz ni la boca si uno no se ha lavado las manos de manera adecuada. Es importante lavar las manos a menudo, sobre todo antes y después de comer, después de sonarse la nariz, toser, estornudar o ir al baño, y siempre que estén claramente sucias.
 
El manejo del estrés es otro aspecto importante para los autores de la publicación. Si tu hijo o hija no duerme bien, tiene incontinencia urinaria, dolores de tripa o de cabeza, o se muestra ansioso, enfadado, con miedo de quedarse solo, etc., es importante hacerle ver que se trata de "reacciones normales ante una situación anormal".
 
No obstante, los síntomas pueden mejorar bastante si se les escucha atentamente y se les da cariño y seguridad, y se crean oportunidades para jugar y relajarse.
 
En caso de que el niño o la niña se halle aislado o ingresado por la enfermedad, se ofrece una respuesta de ejemplo: "Tienes que estar en casa/el hospital porque es lo más seguro para ti y tus amigos. Sé que es duro (puede dar miedo o ser aburrido), pero necesitamos que sigas las reglas para mantenernos a nosotros y a los demás seguros. Pronto todo volverá a la normalidad".
 

Mantener informados a los estudiantes, clave para la prevención

 
La guía también sugiere algunas estrategias para que los estudiantes prevengan y controlen el contagio del COVID -19. Para ello, deben recibir información contrastada y apropiada a su edad, incluidos los síntomas, complicaciones y cómo se transmite y previene el coronavirus.
 
En todas las etapas educativas, resulta importante escuchar las inquietudes de los estudiantes y responder a sus preguntas de acuerdo con su edad, pero sin abrumarlos con demasiada información. También es recomendable hacer hincapié en que todos y todas pueden hacer mucho para mantenerse seguros/as y proteger a los demás.
 
Las sugerencias concretas sobre cómo abordar la situación con el alumnado, tanto los comportamientos saludables como la proactividad en la prevención, difiere en función de la edad.
 

En Educación Infantil y Primaria

 
Para los niños y las niñas más pequeños, es recomendable realizar actividades lúdicas atractivas para enseñarles comportamientos saludables, como cantar una canción mientras ellos y ellas se lavan las manos para practicar la duración recomendada de 20 segundos; o bien usar títeres o muñecas para mostrar los síntomas de la enfermedad y qué hacer si se sienten enfermos o enfermas.
 
En Primaria, hay que ayudar a los niños y las niñas a comprender los conceptos básicos de prevención y control de enfermedades a través de ejercicios prácticos que demuestren cómo se pueden propagar los gérmenes, como por ejemplo poner agua coloreada en una botella con espray y rociarla sobre un trozo de papel blanco y observar luego hasta qué distancia llegan las gotas.
 
También puedes pedir a los estudiantes que analicen situaciones para identificar comportamientos de alto riesgo y sugieran modificar comportamientos. Por ejemplo, la guía sugiere un ejemplo: "Un profesor ha asistido a la escuela con un resfriado, estornuda y lo cubre con su mano, pero luego se la da a una maestra y se va a clase a enseñar.  
¿Fue arriesgado lo que hizo el profesor? ¿Qué debería haber hecho en su lugar?".
 
Sentar a los alumnos y alumnas en clase más separados para evitar tocarse, así como desarrollar estrategias para comprobar que se laven las manos adecuadamente y recompensar a quienes lo hagan frecuentemente, son otras recomendaciones para prevenir y controlar la diseminación del virus en estas etapas educativas.  
 

 En Secundaria y Bachillerato

 
Con el alumnado de Secundaria y Bachillerato es importante incorporar educación sanitaria en todas las asignaturas. En las materias relacionadas con la Ciencia, por ejemplo, se debe incidir en el estudio de los virus, la transmisión de enfermedades y en la importancia de las vacunas. En las ciencias sociales se pueden realizar lecciones sobre la historia de las pandemias y la evolución de las políticas sobre salud pública y seguridad.
 
Promover que los estudiantes hagan sus propias campañas de comunicación para prevenir y actuar contra el coronavirus a través de redes sociales o la web de los centros contribuirá a empoderarlos para ejercer una ciudadanía más activa y los motivará a actuar con el ejemplo.
 

¿Sabías que...?

 
  • El Ministerio de Educación y Formación Profesional ha difundido una serie de infografías que facilitan el conocimiento de algunas medidas básicas para prevenir la propagación del virus entre los más pequeños. Estas se pueden utilizar para trabajar el tema del coronavirus y el lavado de las manos con niños, niñas y adolescentes, "ya que están recibiendo mucha información y no siempre es adecuada a su edad o apoyada en fuentes oficiales".
 
Deja tu comentario