Encuentra tu curso ideal

9%

¿Qué quieres estudiar?

Si no estás, existes, pero nadie te ve

Artículo de opinión


  • Valora

  • Deja tu comentario
Cristina Pascual, directora de Marketing de Bureau Veritas Centro Universitario (Madrid)
A pesar de que, para un centro educativo, son innumerables las ventajas de aparecer en los rankings universitarios; no debemos olvidar que lo verdaderamente importante no es aparecer en una lista de los mejores sino hacer un trabajo de calidad que, acaso, se vea reconocido con ese honor.

En Bureau Veritas, que es líder mundial en evaluación de la conformidad y certificación, nos gusta recurrir al símil de la certificación. Las certificaciones son importantes para las organizaciones empresariales, sí, pero estas no son lo primero, sino lo último, ya que deben ser consecuencia de un trabajo bien hecho, asentado en criterios de calidad y cimentado sobre unos requisitos fijados en estándares internacionales que dan lugar a un sello de calidad que asegura que todo se ha hecho correctamente.

En la actualidad, se ha generado una carrera por aparecer en los rankings como consecuencia de la proliferación que está habiendo en los últimos años de estas listas que clasifican a las mejores universidades, escuelas de negocios e instituciones educativas en general.

Es una realidad que cada vez disponemos de más rankings universitarios y que la influencia de estos es además mayor.

Entre los más conocidos a nivel internacional, figuran el Ranking Académico de Universidades del Mundo de la Universidad Jiao Tong de Shanghai o el Ranking QS de Universidades del Mundo de la empresa británica Quacquarelli Symonds. De gran prestigio son los que elaboran los principales periódicos financieros, como The Times, The Economist, The Wall Street Journal o Financial Times.

Si nos centramos en el ámbito hispánico, podemos mencionar Top 20. Los mejores centros online. Ranking Iberoamericano de formación en español de Wanabis que reúne a las mejores escuelas de negocios y universidades online de España y Latinoamérica y, en cuya última edición, Bureau Veritas Centro Universitario quedó dentro de las 10 mejores. O también el Ranking Web de Escuelas de Negocios  que elabora el Laboratorio de Cibermetría del Centro Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), que recoge a las escuelas de negocios y centros mejor posicionados en la web. En este último, nuestro Centro Universitario ocupó la posición 19, en la última edición de enero de 2013. 

Ante esto, cabe preguntarse ¿es importante para un centro universitario formar parte de uno de estos rankings? ¿qué beneficios y/o ventajas se derivan del hecho de entrar en estas clasificaciones? y, sobre todo, ¿cuáles son las consecuencias para el alumnado? Cuestión que es central ya que, no lo olvidemos, los alumnos deben ser siempre el centro de cualquier institución educativa.

Sin duda, el hecho de ser incluido en estas clasificaciones conlleva numerosas ventajas para un centro universitario. Empezando, porque durante un tiempo nuestro nombre suena en los medios de comunicación y en el boca a boca del mundillo educativo. Anécdota al margen, es difícil abordar todos los beneficios en un pequeño artículo de opinión. Por eso, nos vamos a limitar a resaltar solamente algunos puntos que, por nuestra parte, creemos importantes.

Nosotros creemos que una de las principales ventajas de figurar en los rankings es que estos te permiten destacar frente a otras universidades y, por ello, situarte en una situación sobresaliente con respecto a la competencia. Algo muy positivo de cara a las ventas y que influye en la sostenibilidad y perduración en el tiempo de vida del centro.

Por si esto fuera poco, hay otro factor clave. Cada ranking pone en valor unos criterios y, en función de estos, establece su clasificación. Por ejemplo, el ranking que elabora Wanabis tiene siete criterios: dimensión del centro, alumnos, claustro, metodología, reputación, tipo e información y transparencia.

Esto quiere decir que aparecer en un ranking implica que asumes los criterios que se han valorado para establecer la lista y, lo más importante, que destacas en ellos. No es extraño que los centros que consiguen colarse en estas listas consiguientemente vendan como suyos los valores que definan a la clasificación correspondiente.

Además, siempre se ganarán intangibles como fiabilidad, prestigio, autoridad, referencia… y podríamos seguir. Un conjunto de atributos (muy útiles, por cierto) que no es fácil adquirir y que los rankings te proporcionan inmediatamente.

Aquí llegamos a un aspecto clave. Las ventajas que se adquieren deben usarse con un fin para no desaprovecharlas. Por ello, las universidades y centros universitarios deben saber comunicar correctamente a todos sus públicos los valores o puntos fuertes que les atribuye el ranking correspondiente. Es decir, deben saber trasladar este mensaje al exterior para aumentar sus argumentos de cara a su posicionamiento y a la comercialización de los programas formativos.

Estas son algunos de los principales beneficios que, en nuestra opinión, reporta para un centro universitario estar en un ranking. Pero, ¿y para sus alumnos? Este es el punto más importante y volvemos a recordar que, sin ellos, no tendríamos sentido ni razón de ser. Para el alumnado, cada vez más desorientado, con una situación más difícil, y ante el hecho objetivo de que cada vez tienen más opciones de títulos formativos y de centros donde estudiar; estas clasificaciones pueden ser una herramienta útil para evaluar de forma objetiva la calidad de una enseñanza.

Tradicionalmente, no había manera objetiva de determinar el centro de estudios. Afortunadamente esto ha cambiado. Y ahora, los alumnos disponen, entre otras maneras, de los rankings universitarios que les van a permitir y facilitar esta decisión. No en vano, un ranking te ofrece una selección en base a un listado objetivo de criterios y un baremo de puntuación. De esta manera, el alumno cuanta ahora con una herramienta imparcial para su toma de decisión ganando en seguridad.

Todo esto hace que los rankings sean importantes para los centros universitarios. Pero no deben verse como una meta por sí sola, sino como el resultado y el reconocimiento de proporcionar una educación de calidad para los alumnos.

En Bureau Veritas Centro Universitario, pensamos que hay que ofrecer una formación de primer nivel pensada por y para el alumnado, que se sirva de las nuevas tecnologías del aprendizaje, incorpore mejoras, se asiente en el trabajo del equipo humano, y tenga por meta ayudar a que los alumnos terminen los estudios preparados para entrar en el mercado laboral o, los que ya lo están, mejoren en su carrera profesional. 

Posteriormente, y a consecuencia de todo esto, podrán llegar los rankings, las clasificaciones, las buenas posiciones, ser los mejores, en definitiva, el reconocimiento del trabajo bien hecho, por proporcionar a nuestros alumnos esa educación de calidad superior.
Deja tu comentario