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Orientación dirigida a adultos

Artículo de opinión

En otras ocasiones hemos hablado ampliamente de la importancia de la orientación en el contexto actual, destacando que la mayoría de acciones de orientación se dirigen a adultos desempleados o que necesitan reconducir su carrera profesional. Con este monográfico, Educaweb quiere reivindicar el trabajo del orientador laboral como pieza clave a lo largo de la vida, en situaciones de crisis, transiciones y mejora profesional. Para ello, hemos recopilado experiencias de éxito.


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Laia Mestres i Salud. Redacción de Educaweb
La OCDE presentó un estudio en el que muestra que, como consecuencia de la "intensificación de la recesión" prevista para el próximo año, la tasa de paro subirá hasta el 26,9% en 2013, frente al 25% en 2012.

Las perspectivas de los propios desempleados no son mucho mejores. Según un estudio del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) correspondiente al mes de octubre de 2012, el 67,3% de los parados ve "poco" o "nada probable" que vaya a encontrar empleo en los próximos doce meses.

En medio de esta difícil situación, la figura del orientador profesional cobra especial importancia para dinamizar a los parados y facilitar las herramientas necesarias para mejorar su empleabilidad, atender a su bienestar personal y acompañar en el proceso. Pero, el gobierno ha decidido suprimir la partida presupuestaria destinada a reforzar la red de oficinas de empleo con orientadores laborales. Esto significa que los 1.500 profesionales que fueron contratados de forma extraordinaria por las comunidades autónomas, con la finalidad de apoyar a los desempleados elaborando itinerarios de orientación personalizados, serán despedidos, a menos que las regiones asuman la renovación de sus contratos.

Con el monográfico de orientación dirigida a adultos, Educaweb quiere reivindicar el trabajo del orientador laboral como pieza clave en el contexto actual, por eso, hemos recopilado experiencias de éxito relacionadas con la orientación de adultos.

Orientación dirigida a adultos: necesidades

En otras ocasiones hemos hablado ampliamente de la importancia de la orientación en el contexto actual, destacando que  la mayoría de acciones de orientación se dirigen a adultos desempleados o que necesitan reconducir su carrera profesional.

No son las únicas, porque existen muchos perfiles de demandantes de orientación diferentes, pero las principales necesidades de este colectivo son mejorar las perspectivas laborales o encontrar un empleo, iniciar un proceso formativo, reinsertarse en el mercado laboral después de un largo periodo fuera de él, etc.

Cabe destacar que, desde el inicio de la crisis, la orientación para la búsqueda de empleo ha cambiado, pues actualmente, hay mucha competencia y mucha demanda para poca oferta en el mercado laboral, lo que supone que hay que estar mejor formado, saber dónde y cómo buscar trabajo...

A esta necesidad se le suma la urgencia. Muchos desempleados llevan tiempo en esta situación, con  todo lo que representa a nivel personal, social y económicamente. Alba Martínez, del Programa de Formación e Inserción Laboral de Cáritas Diocesana de Barcelona, reconoce que la principal característica de las personas adultas que atienden en Cáritas es la urgencia para encontrar un empleo, dado que estas personas suelen ser mayoritariamente los miembros que sustentan económicamente al resto de la familia. La demanda por parte de estas personas suele ser para acciones que requieran el menor tiempo para entrar en el mercado de trabajo.

Por otro lado, Mª Luisa Sánchez Almagro, ganadora del premio de Orientación en la modalidad de Orientación laboral y en la categoría de profesionales individuales de los Premios Educaweb 2009, coincide en que la situación económica ha aumentado las necesidades de orientación académica y profesional, tanto de la población autóctona como de los inmigrantes. Según su propia experiencia en la educación de adultos, las principales preocupaciones de los usuarios son la localización de espacios para actualizarse laboralmente. Dentro de esta formación laboral desean aprender a buscar trabajo, cómo organizar la búsqueda, cómo hacer un currículum vitae, cómo enfrentarse a una entrevista, en qué consiste el teletrabajo, cuáles son los nuevos yacimientos de empleo donde pueden buscar trabajo, etc.

De todos modos, entendemos que la orientación es un proceso fundamental a lo largo de toda la vida del individuo y que las medidas que se realizan desde las instituciones, empresas, centros o administraciones públicas no se deben limitar a una acción concreta, aunque es comprensible que en momentos clave como el que estamos viviendo se convierta en un recurso de emergencia.

Funciones del orientador laboral en el contexto actual

Alfredo Muñoz, responsable de Bolsa de Empleo y Programa de Prácticas en Empresas de Fundesem (Alicante), considera que debido a la formación multidisplinar, su creciente importancia y la coyuntura actual, es un error distinguir entre el orientador académico y el orientador profesional. Desde su punto de vista, hoy en día, la función del orientador es reclamada en ámbitos escolares, familiares,  personales y profesionales de una manera holística.

En este contexto, las funciones del orientador/a profesional son múltiples, pero hay dos que se repiten en la mayoría de proyectos llevados a cabo con éxito: el asesoramiento personalizado y el asesoramiento grupal.

Tal y como recoge Concepción Araujo Ponciano en la página web  "Iniciativa Colegio de Pedagogos y Psicopedagogos"1, el asesoramiento personalizado es un proceso variable que parte de las necesidades y motivaciones del usuario/a y llega a ser más o menos largo y profundo según las características de cada persona, lo más usual es realizar entre tres y cinco entrevistas individualizadas.

Según Patricia Cabrera, orientadora Laboral de Sanromán Consultoría y Formación, además de las funciones preparatorias del proceso de orientación, el aspecto central de las funciones específicas es el acompañamiento de la persona para que desarrolle su potencial a nivel profesional. Así pues, a través de las tutorías el orientador debe ser capaz de analizar, junto a la persona orientada, su situación global, de animarle a realizar cierta introspección para identificar sus fortalezas y debilidades para su inserción o mejora laboral. Para ello, potencia competencias comunicativas, como la escucha activa, y el uso de un lenguaje motivacional y respetuoso con las diferentes culturas y características personales para una comunicación eficaz.

En cuanto al asesoramiento grupal, se trata de un proceso diferente, con carácter y dimensión formativa y/o informativa, puede variar entre 9 y 18 horas de trabajo en grupo, según entidades. En este ámbito, se incluirían acciones de orientación para informarse sobre las salidas profesionales de un ámbito en concreto, nuevas tendencias del mercado laboral, herramientas para buscar empleo en la red, etc. Un buen ejemplo de este tipo de actividades es el Taller "Estudiar en el extranjero" realizado por Educaweb en el Prat de Llobregat (Barcelona) en abril de 2012, cuyo objetivo era que los jóvenes (hasta 30 años) conociesen todas las opciones e información de la que disponer para marcharse al extranjero a continuar su formación, realizar prácticas o buscar un empleo.

Notas al pie:

1.-  http://www.icolegiodepedagogos.org/wordpress/?page_id=216


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