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Fomento de la cultura y el espíritu emprendedor en el actual sistema educativo

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Trinidad García Figueroa. Maestra de Educación Infantil en el CEIP "Virgen de la Cabeza" de Campillo de Arenas (Jaén)
"Emprender es un valor que debe fluir en todos los rincones de la sociedad... pero muy especialmente en la educación..."

Reflexión propia que sirve para introducir la confección del presente artículo.

Hay que tener en cuenta que sociedad y educación son fenómenos concomitantes y complementarios... la educación que ofrecen los distintos tipos de educación al niño (formal, no formal e informal) participa de la acción enculturadora de la sociedad.

Cuando en mi reflexión hablo de educación, me estoy refiriendo a la educación formal (sistema educativo institucionalizado, cronológicamente graduado y jerárquicamente estructurado que se extiende desde el segundo ciclo de Educación infantil hasta los últimos años de la universidad); la cual ha de integrar "el emprendimiento" en sus currículos formales, para así favorecer que cada individuo constituya sus niveles de aspiración en función de los cuales orientará su actividad.

Antecedentes y visión actual de esta necesidad educativo-social

Durante los años sesenta, la creencia de que el hombre educado produce más y mejor decidió el incremento de los presupuestos educativos. El proceso educativo aparece como una de las claves del desarrollo económico, reducción de las desigualdades sociales...

Tal democratización de la enseñanza, contrasta con la realidad contradictoria de los setenta, cuando los titulados universitarios pasan a ser el sector de la población con el índice más elevado de parados.

Para los americanos Bowles y Gintis; la educación escolar, junto a la familia, corresponde dotar de rasgos de conducta y personalidad al futuro trabajador.

Blaug considera que la educación contribuye "al crecimiento" pero no como un input indispensable para tal proceso, sino simplemente como una infraestructura que lo facilita.

La sociedad española se ha caracterizado por:
  • Una escasa capacidad para asumir riesgos (optar por abrir un negocio como alternativa profesional)
  • Una preferencia a favor del trabajo por cuenta ajena.
Las barreras fundamentales para la creación de empresas han sido:
  • La falta de Espíritu Emprendedor
  • El miedo al fracaso
A lo cual, en la actualidad, se le suma la brutal crisis por la que estamos atravesando...

La legalidad vigente en Andalucía-Ley Orgánica 2/2007, de 19 de marzo, de reforma del Estatuto de Autonomía para Andalucía-contempla como objetivo básico el 11° "... las iniciativas emprendedoras... como fundamento del crecimiento armónico de Andalucía"

En Educación, los primeros pasos respecto "al emprender" ya se están dando; la L.O.C.E. recogió, por primera vez, una referencia expresa al espíritu emprendedor.

Más tarde, de acuerdo con la L.O.E., el sistema educativo se orienta por lo que respecta...

- Al alumnado
  • Entre sus diversos fines f) "desarrollo de la capacidad de los alumnos… para desarrollar la creatividad, la iniciativa personal y el espíritu emprendedor"
  • En su capítulo I-artículo 13, referido a la Educación infantil-hace explícito que contribuirá a desarrollar la capacidad c) "Adquirir progresivamente autonomía en sus actividades habituales"
Y asimismo, en el Decreto 428/2008, de 29 de julio por el que se establece la ordenación y las enseñanzas correspondientes a la Educación infantil en Andalucía; artículo 4.b, como objetivo aparece:
"Adquirir progresivamente autonomía... y promover su capacidad de iniciativa".

- Al profesorado

En el capítulo I del título III -artículo 91.d- referido a las funciones del profesorado aparece: "La orientación educativa, académica y profesional de los alumnos..." (L.O.E.)

Apostándose por el desarrollo de la competencia básica de Autonomía e Iniciativa personal; pues los alumnos se han de apoyar en iniciativas propias que les sirvan para abordar nuevos retos y enfrentarse a situaciones nuevas. Esta competencia sirve para desarrollar el espíritu emprendedor en todos los ámbitos de su vida cotidiana y de su futura vida profesional. La contribución será mayor en la medida en que se fomenten modos de enfrentarse de manera autónoma y creativa a diversas tareas.

Por tanto, la integración del espíritu emprendedor y la incorporación de la cultura emprendedora desde las primeras etapas del sistema educativo constituirán la verdadera siembra para el futuro.

El tutor/a y l@s maestr@s que impartamos clase a los chavales debemos de guiarlos-orientarlos hacia la generación de dicho valor/actitud/eje; ya que se descubre, se cultiva y por consiguiente, se aprende.

Pero ¿cómo promover el espíritu emprendedor en la escuela?

Primeramente, se deberían paliar las carencias con las que educación cuenta hoy día:
  • Falta de valores culturales del espíritu emprendedor.
  • Desconocimiento de las oportunidades que brinda el emprendimiento.
  • Falta de desarrollo de las habilidades empresariales en los planes educativos de la enseñanza primaria...
De acuerdo con un estudio realizado bajos los auspicios del Ministerio de Educación y Ciencia por parte de las Cámaras de Comercio, su propuesta se cifra en el establecimiento de unos objetivos estratégicos desde un enfoque interdisciplinar:
  • Encaminar la educación no sólo a conseguir las cualidades necesarias para gestionar y dirigir una empresa sino también a generar una cultura del emprendimiento.
  • Construir marcos de colaboración entre el sistema educativo y las empresas para acercar la escuela a la empresa y viceversa.
  • Crear recursos educativos más adecuados y accesibles.
  • Formar redes institucionales de apoyo a los/as emprendedores/as.
  • Introducir en la educación el desarrollo de las cualidades personales relacionadas con el espíritu emprendedor: el docente como Agente de Cambio ...
(Cámaras de Comercio y Ministerio de Educación (2006): El fomento del espíritu emprendedor en la escuela. Madrid: Cámaras de Comercio y MEC].

Y es que se ha de promover un cambio en el estilo de enseñanza de docentes en actividad (cambio de víctima del sistema, a co-protagonista de la trasformación del mismo):
  • Pasar del Estilo Tradicional ( énfasis en la teoría, profesor protagonista, objetivos de aprendizaje impuestos, profesor que da respuestas, castigo del error, profesor infalible, uni-disciplinar, el grupo como agregado).
  • al Estilo Emprendedor ( énfasis en la práctica, alumno protagonista, objetivos de aprendizaje negociados, profesor que genera preguntas, aprendizaje del error, profesor que aprende convirtiéndose en un recurso más para el grupo, multidisciplinar, el grupo como activador, la evaluación se convierte en mecanismo de mejora y calidad de los procesos de cambio más que como control de los mismos, considerar "las nuevas tecnologías" dejando a un lado los planteamientos memorísticos-tradicionales o, por lo menos, usarlos sólo cuando sea preciso, tener en cuenta el conocimiento del entorno dónde va a llevar a la práctica- el centro educativo, el entorno social envolvente y el contexto social general- e interactuar con los mismos).
Admitir, por tanto, toda esta situación exige plantear las categorías del nuevo profesional de la enseñanza:
  • Espíritu innovador
  • Flexibilidad
  • Trabajo en equipo
  • Conocimientos tecnológicos
  • Favorecer que el alumnado aprenda a responsabilizarse de sus propias decisiones y compromisos; desarrollándoles su autonomía e iniciativa personal a la par que educarles su responsabilidad en las decisiones tomadas, para bien como para "no tan bien" inculcándoles que de los errores también se aprende (el que no actúa no hierra)
  • Creer en su profesión, tener sentido de la responsabilidad y compromiso
Bajo mi punto de vista, la cultura emprendedora y el espíritu emprendedor se han de considerar no sólo como una asignatura concreta sino como una metodología de enseñanza y desde una perspectiva de carácter transversal; posibilitando al alumnado interiorizar éste valor de la sociedad y no sólo aprenderlo, con el fin de que su actitud ante la vida esté regulada por este eje.

Los aspectos clave en el fomento de la educación para fomento del espíritu emprendedor -la educación del emprendimiento- se hayan en:
  • Facilitar la formación
  • La necesidad de trabajar desde el ámbito educativo no sólo la formación en gestión y temas técnicos sino (y fundamentalmente) igualmente las capacidades emprendedoras: la creatividad, la innovación, tolerancia a la frustración... y las Competencias Emprendedoras Básicas individuales y sociales (Álvarez, 2004): saber buscar la información, tender redes de apoyo, tener capacidad para trabajar en equipo, manejo de internet...
  • Favorecer la motivación (anterior al desarrollo y concreción de cualquier nueva idea)
  • Romper con el estigma del fracaso (tanto en la educación como en la empresa)
Para finalizar puntualizo que:
  • La presencia de la cultura emprendedora en el seno de la comunidad a la cual pertenecemos, de la que es parte la escuela, aparece esencial para que en la misma ocurran hechos conducentes a la generación de riqueza productiva; no sólo monetaria sino también intelectual y artística. Estando implicados: profesorado, centros, padres y madres, alumnado, TICs, medios de comunicación...
  • El alumno nunca es demasiado pequeño, es pequeño por su madurez y en función de ella se le exige un nivel en el aprendizaje u otro, el cual de manera cíclica se irá perfeccionando y ampliando, de modo que; podamos formar/crear personas capaces de liderar sus propios proyectos.
En sintonía con la propuesta de Dolabela,Fernando (2003): "Si logramos dotar a los propios sueños de realización, la iniciativa para perfeccionarse y crear procesos educativos pertinentes y contextualizados en pos de una cultura emprendedora, está en nuestras propias manos".
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