La llamada de Educaweb a los profesionales de la educación, esta vez, es interesante y actual. Se trata de hablar de las ventajas y las desventajas de las TIC en las aulas. Habrá que tratar el tema desde varios puntos de vista. Desde la didáctica general, el uso de los recursos informáticos (en todas sus variantes y extensiones) presenta el valor indudable de la transferencia a todas las actividades del aprendizaje: motivación a la hora de explorar en el mundo de los conocimientos y de la ciencia, refuerzo positivo con ejercicios actualizados y variadísimos, ahorro de tiempo al profesor para hacer otras tareas mientras los alumnos trabajan, e interactividad con diversas materias y estructuras cognitivas. Desde la didáctica especial, posibilidad de profundizar y de detallar en las asignaturas que más le atraen al alumno o en las que avanza más despacio. Desde la comunicación, alternativas para ampliar el horizonte local y del país, apreciando otros mundos y otros modos de enfocar las culturas. Desde la psicología de los alumnos, una buena manera de educarles hacia el espíritu crítico, hacia su autonomía personal y de ampliar la competencia digital. Desde la orientación profesional, facilidades para explorar el mundo del trabajo, los oficios y profesiones, comparándolos entre sí y abriendo posibilidades de inserción laboral y de entrada en programas para aprender a tomar decisiones y comprender los pros y los contras del trabajo y de la elección profesional o académica. Ahora bien: para conseguir que el uso de las tecnologías sea eficaz y productivo, se requiere una impresionante programación previa de las actividades, porque el riesgo de que el alumnado se desvíe y se diversifique es enorme. La planificación exige que el profesorado trabaje en equipo y que tenga un reservorio congruente y sólido de actividades y de recursos (off line y on line) preparados para cada unidad de trabajo y para cada unidad de competencia. Si se ha de aprender significativamente, además, las metodologías didácticas han de regirse por los principios del constructivismo: actividad, síntesis, congruencia, evaluación continuada y reflexión sobre la acción. El profesorado que quiera obtener el máximo beneficio y eficacia de las TIC habrá de reconstruir su modo de enseñar y de reestructurar a los grupos de alumnos de maneras muy concretas, más cercanas al aprendizaje por problemas o por proyectos que a las reglas del aprendizaje lineal. Y los procedimientos evaluativos han de cambiar radicalmente. Creo que las editoriales aún no han presentado contenidos y programas adecuados a estas nuevas maneras de enseñar/aprender. Es todo un reto. Pero no por ello nos hemos de desanimar. Plataformas como Educaweb han de iniciar urgentemente el desembarco en las aulas.
