Las funciones de los directores de centros educativos son complicadas de definir, especialmente si tenemos en cuenta las cuestiones "transversales” que aparecen en un centro u organización educativa: la aplicación de las nuevas tecnologías, la atención a la diversidad, la gestión administrativa y del personal, etc. En la actualidad, son bien conocidas las habilidades y aptitudes que influyen en la buena gestión y dirección de un centro u organización educativa: los estilos de liderazgo, la formación y perfil del director o gestor, la gestión del cambio en la organización o la estructura del centro, las habilidades para favorecer un buen clima laboral, etc. Pero, ¿los directores tienen la formación suficiente para asumir sus funciones con éxito?
En el monográfico 185 sobre Gestión de Centros educativos hemos recopilado las opiniones de los expertos sobre la gestión y dirección de centros, haciendo énfasis en la necesidad de una formación que complemente y facilite las tareas de los directores y gestores.
La gestión de los centros, instituciones y organizaciones educativas
Los responsables de la gestión de un centro educativo, universitario o de formación deben ser profesionales de doble vertiente. Por un lado, buenos profesores y, por otra parte, buenos gestores. Los expertos consultados coinciden en afirmar que, cada vez más, los directores o gestores tienen que hacer frente a una mayor variedad y cantidad de temas, que además, muchos de ellos requieren formación y conocimientos específicos:
- Gestión de equipos: el director debe asumir el liderazgo y coordinación del equipo de profesores, el personal de administración y servicios. Para lograr que este tipo de gestión funcione son necesarias unas habilidades, actitudes y procedimientos específicos.
- La relación con el entorno: la relación con las familias y el alumnado se ha hecho más compleja con los años. El diálogo para dar respuesta (o no) a las demandas, la exigencia de que esas respuestas se den con calidad, la diversidad de esas demandas, etc. exigen que el equipo directivo tenga un bagaje formativo específico que no tiene por qué haber adquirido en su labor como docente.
- Las relaciones con la administración: el desarrollo de una amplia normativa escolar, la exigencia de supervisión de determinadas áreas de la gestión, la realización y divulgación de numerosos documentos de organización, la aparición de nuevos temas a los que la dirección debe dar respuesta… exigen que el equipo directivo tenga unos determinados conocimientos, actitudes y domine los procedimientos.
- Funciones propias de la docencia y la administración de recursos: el equipo directivo, a pesar de todo lo anteriormente mencionado, no debe olvidar que lo que justifica la existencia del centro es el proceso de enseñanza y aprendizaje.
Evidentemente, existen muchas otras funciones a las que debe hacer frente el director o gerente de un centro, pero a grandes rasgos, estas definiciones nos sirven para hacernos una idea de la importancia de la formación específica. Parece claro que la dirección de un centro debe recaer en personas capaces que estén suficientemente preparadas para estas nuevas funciones.
Formación para los gestores de la educación
Como hemos visto, las tareas de gestión de centros educativos son diferentes a los procesos habituales de enseñanza-aprendizaje. Aunque es imprescindible conocer la práctica de la docencia para poder gestionar un centro educativo, los expertos consultados coinciden en afirmar que es necesaria una formación específica para la correcta gestión de un centro educativo.
Según el estudio Formación y motivación de los directores. Evaluación de la función directiva del Instituto Nacional de Calidad y Evaluación (INCE) del Ministerio de Educación, existen 5 aspectos clave que influyen en la dirección de un centro u organización educativa:
- el perfil personal y profesional de los directivos
- el ejercicio de las funciones directivas
- el funcionamiento del centro
- el apoyo a la función directiva
- la imagen de la función directiva.
Teniendo en cuenta estos aspectos se deben diseñar las acciones formativas. La mayoría de universidades han diseñado programas de máster, postgrado o cursos de específico sobre la gestión de centros educativos. Las temáticas son muy variadas y a menudo hacen énfasis en algún tema en concreto, como la legislación educativa, organización de recursos humanos, análisis y gestión de la calidad, etc.
En este sentido, José María Vázquez, rector de la Universidad Internacional de La Rioja (UNIR), apunta en su artículo que la transversalidad de la gestión educativa provoca que la definición de un modelo formativo sea compleja. Así pues, la formación adecuada para dirigir un centro educativo debe incluir dirección de equipos humanos (organización, motivación, incentivación, implicación, recursos humanos, etc.); Innovación, especialmente en el ámbito de las nuevas tecnologías; gestión económica, etc.
Laia Mestres i Salud. Redacción de Educaweb.com
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