Ilustrador técnico/científico

Los ilustradores técnico-científicos elaboran dibujos detallados para publicaciones técnicas o científicas, como libros de texto y manuales de referencia.

Los ilustradores técnico-científicos elaboran dibujos y diagramas para ayudar a la gente a entender la información científica o técnica. Pueden hacerlo para:

• Manuales de instrucciones o de mantenimiento y gráficos murales (por ejemplo, un folleto que muestra cómo realizar el mantenimiento de una caldera de calefacción central).
• Diagramas de circuitos (que muestran el flujo de corriente eléctrica en los dispositivos electrónicos).
• Vídeos de instrucciones.
• Diapositivas para presentaciones y conferencias.
• Libros de referencia y de interés general.
• Material educativo.

Algunos ilustradores se especializan en un campo particular de la ciencia o la tecnología. Por ejemplo, algunos realizan ilustraciones de plantas y animales para enciclopedias, otros crean ilustraciones del planeta o del funcionamiento de una pieza de maquinaria, etc.

Los ilustradores técnico-científicos previamente han de saber qué información el usuario necesita obtener de la ilustración. Por lo general, reciben para ello unas instrucciones que describen lo que se pretende conseguir con la ilustración. A continuación, se aseguran de que disponen de toda la información que necesitan para producir una ilustración precisa. Esto puede implicar:

• investigar el tema
• realizar visitas in situ
• hablar con los autores, ingenieros y/o diseñadores
• estudiar dibujos, esquemas y planos de ingeniería.

Los ilustradores técnico-científicos deciden entonces qué aspecto debe tener la ilustración. Las herramientas que utilizan varían: plumas y rotuladores, lápices, pinceles y técnicas de aerógrafo, etc. Asimismo, utilizan en sus obras gráficos por ordenador y a veces fotografías.

Una vez terminada la ilustración, pueden intervenir en la compaginación insertando la imagen en el texto o preparando la ilustración para la impresión.

Gran cantidad de ilustradores son freelance y trabajan para diferentes clientes.

Para ser ilustrador técnico-científico, se necesita:

• Poseer una buena capacidad de observación.
• Tener unas excelentes aptitudes para el dibujo.
• Dibujar claramente y con precisión.
• Tener un buen sentido visual.
• Mostrar interés por la materia en la que esté trabajando y algunos conocimientos sobre la misma.
• Prestar atención a los detalles.
• Conocer el software de gráficos por ordenador.
• Dar a su trabajo un enfoque flexible.
• Trabajar con plazos y ajustándose a los presupuestos.
• Conocer las técnicas de impresión.
• Poseer buenas aptitudes para la investigación.
• Saber trabajar con diferentes técnicas artísticas y materiales.
• Poseer buenas capacidades de comunicación, presentación y negociación.

Si se trabaja como ilustrador técnico-científico autónomo o freelance, se necesitan capacidades comerciales y de marketing.

• Aptitudes para dibujar con precisión y claridad.
• Aptitudes para el diseño asistido por ordenador.
• Aptitudes para los negocios obtenidos mediante el autoempleo.
• Capacidad de arreglárselas con un trabajo y unos ingresos fluctuantes.
• Capaz de emplear colores y formas de forma creativa.
• Capaz de encajar críticas y rechazo.
• Capaz de prestar atención al detalle.
• Capaz de seguir instrucciones.
• Capaz de trabajar con un presupuesto.
• Capaz de trabajar con vencimientos.
• Capaz de trabajar tanto solo como en equipo.
• Conocimientos de diseño gráfico, informática, fotografía y nuevos medios de comunicación.
• Conocimientos en software de escaneo.
• Conocimientos en temas técnicos.
• Conocimientos en varios tipos de materiales.
• Emprendedor.
• Flexible en la realización de sus tareas.
• Habilidad para el dibujo.
• Habilidad para el diseño.
• Habilidad para el marketing.
• Habilidad para la negociación.
• Habilidad para realizar presentaciones.
• Habilidades artísticas.
• Habilidades comunicativas.
• Habilidades en pintura.
• Persuade a la gente a comprar.
• Planifica cómo debe llevarse a cabo el trabajo.
• Queda con clientes actuales y potenciales.
• Realiza investigación.
• Resuelto.
• Se asegura de que las necesidades del cliente están cubiertas.
• Se le ocurren nuevas y creativas ideas.
• Seguro.
• Toma decisiones sobre cómo utilizar imágenes, el espacio, el color y el estilo.
• Usa variedad de materiales y métodos artísticos.

A continuación se relacionan algunos de los estudios que permiten ejercer esta profesión. Hay que tener en cuenta que, dependiendo del ámbito de especialización, es posible que se tenga que complementar la formación con otros cursos más específicos del sector. La formación continua es un aspecto clave para la mejora profesional.

• Certificado de Profesionalidad en Ilustración