Descripción
Este curso es una formación profesional en Terapia Gestalt Práctica.
Enumeramos a continuación aquellas características que hacen que ésta sea una formación única en España:
+ Durante todas las sesiones de formación los asistentes asisten a sesiones terapéuticas completas de los alumnos que se están formando.
En lugar de revelar situaciones pendientes de cierre y luego cerrarlas en consulta privada, todas estas situaciones se trabajan en el grupo de formación de terapeutas. De esta forma pueden reflexionar y visualizar todos aquellos elementos teóricos que pudieran estarse expresando, sin que suponga un coste adicional para los terapeutas en formación. Asimismo los alumnos vanr trabajando asuntos personales de forma que caminan hacia la coherencia como terapeutas y ello les permite ayudar a otras personas desde su propia experiencia y no desde la teoría o las técnicas de otros.
+ Se incentiva que cada alumno vaya desarrollando su propio estilo terapéutico, con la supervisión del responsable de la formación. De esta forma cada alumno hace su aportación a la terapia Gestalt, para evitar, como previene Fritz Perls, que los terapeutas apliquen de forma mecánica una técnica (que sería incompatible con la propia la terapia Gestalt)
+ Durante la formación los alumnos aprenden a incorporar en su vida diaria las enseñanzas propias de la Gestalt Práctica. Es fundamental que los terapeutas tengan una coherencia y credibilidad, y que cualquier cosa que vayan a trabajar con sus pacientes lo tengan trabajado y resuelto en sí mismos.
+ Desde el primer año, los alumnos tienen la oportunidad de ir practicando como terapeutas gestálticos (sólo dentro del grupo de formación), con la garantía de que estar supervisados por el responsable de la formación, que se encarga de que no quede ninguna persona incompleta. En la Escuela Shiosaki creemos que no es posible ser un excelente terapeuta sin una abundante práctica, pues de otra forma lo único que se consigue es mecanizar una serie de técnicas.
+ Dentro de la Escuela de Gestalt Práctica no se permite que las terapias tengan un tiempo previamente limitado, pues es incoherente con la forma de trabajo de la propia Gestalt. Consideramos irresponsable el uso extendido que se hace de la consulta psicológica, en la cuál se limita el tiempo a 50 minutos, momento en el cuál el paciente debe abandonarla consulta hasta la siguiente sesión. En algunos casos esto puede dar lugar a graves consecuencias personales a consecuencia de terapias dejadas a medias. Un terapeuta está ayudando a personas, y esta relación de ayuda no puede estar determinada por una hora prefijada en el reloj. En función del criterio del terapeuta, la terapia podrá ser más corta o más larga.
Por este motivo, aunque los talleres tienen un horario delimitado, en caso de necesidad éste se ampliará y adaptará. Esta es una condición particular de los terapeutas formados en la Escuela de Gestalt Práctica y es una garantía para los pacientes.