Formarse en el extranjero es hoy una opción elegida por muchos estudiantes que quieren darle un plus a su carrera, según la Encuesta Sobre Movilidad Internacional de los Estudiantes elaborada con datos del año pasado por el Instituto Nacional de Estadística, más de medio millón de jóvenes españoles decidieron pasar por esta experiencia educativa internacional, una cifra, que según las expectativas, irá en aumento al tomar conciencia nuestra sociedad de sus ventajas y apoyar desde las instituciones a quienes deciden traspasar fronteras y como expresó el El Rey Felipe VI sepan considerar el mundo entero como su campo de acción. Cuando en 1954, abrió sus puertas en Suiza la escuela internacional Les Roches la idea de completar o cursar estudios en el extranjero no se veía como la gran alternativa que este tipo de educación internacional representa en la actualidad.
En nuestro caso, al dedicarnos a la Alta Dirección Hotelera, la internalización de los campus que se han ido inaugurando sucesivamente en España y China tras la matriz suiza, vino de forma natural. El carácter universal de las materias a estudiar y la vocación cosmopolita que la profesión turística implica nos han convertido en centro de referencia para quienes prefieren estudiar en una institución que pertenezca a una red global y por lo tanto, multiplique el carácter internacional de las titulaciones al hacer posible un plan de intercambio entre distintos países de referencia.
Esa amplificación de oportunidades, con un buen desarrollo de prácticas internacionales, es uno de los aspectos más importantes que se han de tener en cuenta a la hora de plantearse estudiar en el extranjero. También es notable en este sentido, la importancia de credenciales que presente el centro y su pertenencia a organismos o asociaciones educativas internacionales como prueba de solvencia y garantía.
Otro dato importante que hay que analizar es la situación geográfica del centro elegido, accesible a la ciudad con buena comunicación y transportes, con espacios naturales cercanos e instalaciones y residencias que garanticen el confort del alumno tanto dentro como fuera de las aulas.
Así mismo es primordial el ambiente en el que vivirá el alumno. Un campus en el que se den cita alumnos y profesores de distinta procedencia es el entorno ideal para el mejor crecimiento personal y profesional. Los centros educativos con proyección internacional son aquellos en los que se dan cita multitud de nacionalidades, quienes fomentan y respetan la singularidad convierten sus campus en un ejemplo de convivencia, multiculturalidad e internacionalidad y sus aulas en punto de encuentro de múltiples culturas.
Por último hay que contar y sopesar las alternativas de financiación, así como los trámites y documentación exigidos según el país de destino para obtener los permisos pertinentes relacionados con residencia y estudios.
En cualquier caso, desde nuestra larga experiencia en la formación internacional y en línea con la visión global que por fin impregna a nuestro sistema educativo, apostamos por este tipo de formación ya que estudiar y combinar las prácticas laborales que son parte obligatoria de nuestros programas, en el extranjero es una experiencia sumamente enriquecedora, determinante para el dominio de varios idiomas y con gran repercusión para el posterior desarrollo profesional.
