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Proceso de toma de decisiones en el alumnado de Enseñanza Secundaria Obligatoria. Importancia del Departamento de Orientación en dicho proceso

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Maria del Carmen Rodríguez Zafra. Licenciada en Pedagogía y profesora interina de Secundaria de la especialidad de Orientación Educativa en Andalucía
A lo largo de nuestra vida debemos ir tomando distintas opciones, en algunas ocasiones la decisión es más sencilla pero en otras resulta ser compleja cuando realmente decidimos nuestro futuro. Tomar decisiones constituye una de las capacidades más importantes en el desarrollo de un individuo, pues repercute en su vida cotidiana y futura. Esta capacidad constituye un proceso de aprendizaje de tipo cognitivo y actitudinal, que implica un aprendizaje y el entrenamiento por parte de la persona que quiere tomar una decisión, para ser capaz de elegir eficazmente en las diferentes situaciones que se le presenta en la vida.

Pues como muy bien indican Álvarez, M. y Bisquerra, R. (1997) en su obra "Manual de orientación y tutoría” tomamos decisiones constantemente, unas más cruciales que otras, pero todas ellas, según estos autores, poseen dos componentes:

Actitudinal. Según el cual, cada sujeto debe mostrar interés por querer tomar una decisión o decisiones.

Competencial No es suficiente con querer tomar una decisión o decisiones, sino que el individuo se le ha de dotar de una serie de competencias y destrezas.

Pero, ¿desde los centros educativos es necesario que se fomente dicha capacidad?

Pues sí, es fundamental que se fomente y se le dote al alumnado de las competencias y destrezas necesarias para que se enfrente al mundo laboral existente y a las diversas decisiones que deberá tomar a lo largo de su experiencia vital.

Desde el punto de vista normativo, se indica lo siguiente:

- En la Ley Orgánica 2/206, de 3 de mayo, de educación (LOE):

- Artículo 1 f. Se considera como principio: La orientación educativa y profesional de los estudiantes.
- Artículo 22.2. Se considera como finalidad de la enseñanza Secundaria obligatoria: "preparar a los jóvenes para su incorporación a estudios posteriores y para su inserción laboral”
- Artículo 25.6. Adoptando una clara dimensión orientadora, sobre todo en 4º E.S.O., tanto para los estudios postobligatorios como para la incorporación a la vida laboral.

Asignándose una gran responsabilidad al Departamento de Orientación en Andalucía tal y como se establece en su normativa:

- Decreto 200/1997 por el que se aprueba el reglamento Orgánico de los Institutos de Educación Secundaria.
- Orden 27/7/2006, por el que se regulan determinados aspectos referidos a la organización y funcionamiento del Departamento de Orientación.
- Orden 27/7/2006 por el que se regulan determinados aspectos del Plan de Orientación y Acción Tutorial en los Institutos de Enseñanza Secundaria.

Las competencias básicas que deberían fomentarse desde los centros educativos vienen recogidas también en normativa:

- Decreto 231/2007, de 31 de julio, por el que se establece la ordenación y las enseñanzas correspondientes a la educación secundaria obligatoria en Andalucía. Se establece en el artículo 6.2 las siguientes competencias que debería adquirir los jóvenes para favorecer su desarrollo integral y como consecuencia su empleabilidad:

- Competencia en comunicación lingüística. El alumnado deberá emplear el lenguaje como instrumento de comunicación con su entorno. Dicha competencia se verá muy bien reflejada en la resolución de una entrevista de trabajo.

- Competencia en el conocimiento y la interacción con el mundo físico y natural. Y la competencia social y ciudadana. El alumnado debe conocer en qué entorno se mueve, cuáles son las características del mercado laboral y cuáles los requisitos para poder acceder a él.

- Competencia digital y tratamiento de la información. Como bien sabemos, la búsqueda de empleo en la actualidad se realiza a través de búsquedas electrónicas, por lo tanto es crucial que el alumnado conozca los medios a su alcance.

- Competencia y actitudes para seguir aprendiendo de forma autónoma a lo largo de la vida. No debemos olvidar que la formación debe ser permanente, y el alumnado deberá estar en una constante actualización para poderse insertar en las demandas del mercado laboral.

- Competencia de razonamiento matemático. Dicha competencia servirá al alumnado para interpretar las diversas informaciones que se vierten sobre su entorno, por ejemplo, estadísticas, encuestas de opinión, etc.

- Competencia para la autonomía e iniciativa personal. El alumnado deberá elegir con criterio propio y espíritu crítico, de manera que lleve a cabo las iniciativas necesarias para desarrollar la opción elegida y sea responsable de ella.

Pero toda esta carga normativa, ¿Cómo se plasma en la práctica?

En Andalucía, desde el Departamento de Orientación y teniendo como instrumento pedagógico-didáctico crucial el Plan de Orientación y Acción Tutorial se deben emprender las actuaciones de carácter preventivo e integradas en el currículo de manera que el proceso de toma de decisiones impregne toda la etapa de la enseñanza secundaria obligatoria. Y por tanto, se fomente cada una de las competencias que hemos descrito anteriormente.

Para ello se deberá:

- Facilitar el proceso de autorientación del alumnado, para que el/la alumno/a se conozca a sí mismo/a, sea consciente de cómo es, cuáles son sus expectativas e intereses y valores; para que los analice, los integre y sea capaz de manera autónoma enfrentarse a la realidad de su entorno y por consiguiente a las características del entorno laboral, tomando decisiones eficaces.

- Facilitar las estrategias para la toma de decisiones del alumnado respecto a su futuro profesional y a la elección de un itinerario formativo ajustado a sus intereses, actitudes y capacidades.

- Ofrecer información sobre las distintas opciones formativas existentes al término de la Educación Secundaria Obligatoria al alumnado y a las familias.

- Facilitar el proceso de conocimiento del mundo del trabajo, las ocupaciones favoreciendo la transición a la vida activa, la inserción laboral y la formación a lo largo de la vida.

¿Cómo se consiguen dichos objetivos o finalidades?

Desde el Plan de Orientación y Acción Tutorial, se pueden diseñar acciones dirigidas al alumnado desde el comienzo en la Enseñanza Secundaria Obligatoria hasta concluir ésta. De manera progresiva, el alumnado se le dote de las destrezas y competencias necesarias para ir tomando decisiones, en primer lugar sobre cuestiones cotidianas para pasar a cuestiones laborales. Trabajando el autoconcepto y autoestima, motivaciones e intereses, expectativas, etc. Dichas acciones pueden ser realizadas en los horarios dedicados a la tutoría.

Desde las programaciones didácticas de cada uno de los docentes. Sería fundamental que en cada una de las materias se trabajasen los aspectos que afectan al proceso de toma de decisiones y las competencias descritas anteriormente que sirven para conseguir dicho proceso. Así por ejemplo, en la materia de lengua se fomentase la competencia lingüística con la realización de cartas de presentación, o simulación de una entrevista, etc. En la materia de matemáticas se podría trabajar la competencia de razonamiento matemático, realizando actividades de estadística respecto a la tasa de paro juvenil, etc.

Por lo tanto, para conseguir una mayor conexión entre el centro educativo y la realidad social, es necesario que los alumnos y las alumnas sean conscientes de lo que existe en el mercado laboral, qué competencias se les va a demandar y qué requisitos deberán cumplir para acceder a un puesto de trabajo. Además de ello, deberán formarse como personas autónomas que deberán tomar decisiones eficaces. En todo este proceso, el papel del departamento de orientación junto con la colaboración de los equipos educativos será crucial para que todo el proceso de aprendizaje sea progresivo y no se convierta la orientación en un hecho puntual y ofrecido sólo al finalizar la Enseñanza Secundaria Obligatoria.
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