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El Bachillerato Internacional, un programa abierto
Artículo de opinión
Lo que comenzó en el último cuarto del siglo pasado como un programa de estudios para dar educación a una élite selecta de hijos de diplomáticos y de ejecutivos del mundo de la empresa ha llegado a convertirse en el programa de estudios internacional preuniversitario más ansiado por cualquier escuela que se precie de prestigiosa. El número de alumnos que estudia el BI (Bachillerato Internacional) ha crecido enormemente en los últimos años. En los años 90 el BI se desarrolló muchísimo en los Estados Unidos, tanto en colegios privados de secundaria como públicos. La razón de tanto éxito se debió a que muchas instituciones públicas querían darle a sus centros un refuerzo de calidad de enseñanza ante unos quizá devaluados programas académicos. La mayoría de estos institutos públicos matriculaban a sus alumnos más brillantes para los exámenes del BI, creando así un grupo selecto de aspirantes universitarios.
Actualmente la tendencia del BI es a crecer en todos los países, sobre todo en Asia, donde se espera que en un futuro próximo se cuenten por centenares las escuelas que impartan este programa.
Lo que en sus inicios fue un programa de bachillerato de dos años, bautizado como programa del Diploma, ahora cubre todo el ámbito de la enseñanza: primaria, secundaria y bachillerato.
¿A qué se debe el éxito?
Las claves del éxito del BI se han debido a que es un programa de estudios que ofrece un abanico amplio de asignaturas y una buena base de formación. Los estudiantes que acceden a él tienen que estudiar obligatoriamente una lengua A1, la lengua materna, matemáticas a diferentes niveles, una ciencia, una asignatura de humanidades, una segunda lengua y otra asignatura más a elegir entre las categorías anteriores. En total, el alumno estudia seis asignaturas durante dos años. Los profesores lo preparan durante este tiempo para un examen externo elaborado por el BI.
Además de las asignaturas académicas, los alumnos deben hacer una monografía de un máximo de 4,000 palabras sobre un tema de investigación siguiendo un formato de disertación académica.
Paralelo al programa de estudios, las actividades extracurriculares están organizadas en torno al programa CAS (Creatividad, Acción y Servicio a la comunidad).
Ante un programa de estudios de bachillerato tan vasto, otros programas de estudios internacionales como por ejemplo el británico - de únicamente tres asignaturas- , se quedaron un tanto cortos, de ahí el éxito del BI en escuelas donde la lengua de instrucción es el inglés.
Un programa para los tiempos que corren.
Como profesores de lengua y literatura debemos decir que el programa del BI es sobre todo práctico: para A1, lengua materna hay que leer quince libros en dos años, nueve escritos en la lengua del estudiante y seis en traducción, lo cual lleva a que el alumno, al cabo de estos dos años tenga una amplia visión de lo que es la literatura. No se estudia historia de la literatura, no se memorizan fechas ni vidas de autores. Se estudian obras en su contexto histórico y se elaboran trabajos comparativos tanto orales como escritos y comentarios de texto.
Respecto a la segunda lengua, como profesores de español y francés lengua extranjera, debemos decir que el programa del BI resulta muy satisfactorio ya que se busca el aprendizaje práctico por parte del estudiante. La enseñanza se hace partiendo de la lengua en sí y el enfoque es que los alumnos hagan uso activo de la misma. Las lenguas extranjeras pueden estudiarse a varios niveles: Ab initio, para estudiantes principiantes. Lengua B para estudiantes con al menos dos años de estudio en secundaria, y A2 para estudiantes bilingües o que han estudiado en colegios donde el idioma de instrucción era diferente a la lengua materna.
Los estudiantes españoles que estudian el BI en el extranjero.
Nuestra experiencia en varios Colegios del Mundo Unido y en otras instituciones privadas tanto en España como en el extranjero, nos ha mostrado que los estudiantes españoles que estudian y trabajan bien en secundaria en el sistema español, no tienen ningún problema para aprobar el Bachillerato Internacional. Generalmente poseen una sólida base de conocimientos en comparación con estudiantes de otros países. Casi todos ellos llegan con el inglés que han aprendido en el instituto, y que al principio pudiera parecer insuficiente para seguir el día a día de materias como historia, filosofía, etc. pero a los pocos meses de convivencia con el inglés se sueltan en esa lengua y empiezan a brillar. En la mayoría de los casos, los estudiantes españoles que llegan con el inglés del bachillerato se integran en la clase de inglés B, segunda lengua. Sin embargo, muchos de ellos en el segundo trimestre dan el salto y se matriculan en el curso de A2, para estudiantes bilingües con excelentes resultados. Algunos estudiantes españoles que han tenido la suerte de estudiar inglés en cursos de verano en el extranjero han llegado incluso a estudiar inglés A1, curso para nativos.
Para cualquier profesor de lenguas es fascinante ver el progreso de estos jóvenes en únicamente dos años. El miedo y la timidez del principio se disipan a los seis meses y a partir de ahí, sólo les queda subir en la escalera del conocimiento.
Por otro lado, desde el punto de vista de los padres, el BI da unidad al programa educativo de hijos de padres que viven en el extranjero y que suelen cambiar de país por motivos profesionales. Hoy en día es fácil encontrar una escuela que enseñe BI en cualquier ciudad importante del mundo.
Para las familias que viven en España, los padres ven cómo se pueden abrir los horizontes de sus hijos dentro del país o en el extranjero. Hemos visto casos de estudiantes españoles brillantes que se los disputaban representantes de universidades importantes de Estados Unidos y Europa.
Y después del BI, ¿qué opciones hay?
La entrada en la universidad.
La vuelta al sistema español de los estudiantes españoles que han estudiado el BI en el extranjero, no siempre ha sido fácil. Recordamos las quejas de algunos de ellos al volver a un sistema rígido de enseñanza basado en conocimientos memorísticos, sin embargo, somos conscientes de que los tiempos cambian y de que hay universidades en España tan abiertas o más que cualquier otra del extranjero.
La tendencia en los últimos años de los estudiantes españoles en el extranjero es que muchos de ellos quieren continuar sus estudios en universidades extranjeras, a pesar de algunos de los privilegios recibidos recientemente como por ejemplo el acceso directo a la universidad española sin tener que hacer el examen de selectividad.
Las razones que dan para querer estudiar fuera son múltiples:
1.- Los programas universitarios en países como los Estados Unidos y el Reino Unido son mucho más flexibles que los españoles y se adaptan mejor a las necesidades de los estudiantes. Ofrecen el atractivo de cursillos de iniciación para indecisos en su carrera.
2.- Aunque no siempre es así, los programas en el extranjero suelen ser más cortos que los españoles.
3.- Ofrecen carreras que en España no existen.
4.- Algunos países como los Estados Unidos aceptan fácilmente estudiantes extranjeros que han estudiado en BI porque saben que es un programa riguroso y prestigioso. Sin embargo, una cosa es que acepten al estudiante y otra muy distinta es que le den además una beca de estudios. Por nuestra experiencia, en los últimos años podemos decir que la ayuda financiera de universidades estadounidenses a estudiantes españoles es muy escasa para familias de clase media. Las universidades estadounidenses son muy caras, más de 40,000 dólares por curso académico.
Salidas educativas y profesionales.
Al ser el BI un programa académico sólido en diferentes planos ofrece una gama de salidas más amplia que otros programas:
En el plano científico hay muchos estudiantes que han seguido carreras de ciencias y han continuado como investigadores gracias a la buena base recibida en los cursos de ciencias del IB y al aspecto práctico del programa ¡Aquí el laboratorio se usa de verdad!
Gracias al conocimiento de lenguas de los estudiantes, es fácil encontrar ex alumnos de BI que trabajan en organismos internacionales.
A través del programa CAS y el servicio a la comunidad los estudiantes descubren la sociedad y tratan de mejorarla ya sea creando sus propias ONG, trabajando para las que ya existen o convirtiéndose en creadores clave de proyectos de enorme importancia para esas instituciones.
Un programa tan amplio ofrece muchas posibilidades a la imaginación y creatividad de los estudiantes al tiempo que les da solidez en sus conocimientos y capacidad de análisis crítico. Un gran número de ex estudiantes de BI ocupan ahora puestos de importancia en el mundo de las artes y de las letras.
Para concluir, el BI es un programa que exige mucho del alumno, pero las recompensas pueden ser muy grandes e limitadas.
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